Editor IAM
El club blanco se reafirma en que no cree que el cambio en el CTA sea real hasta que desaparezcan los últimos rescoldos de la etapa de Negreira.
El Madrid se siente indignado y al mismo tiempo, reconfortado tras lo sucedido contra el Mallorca del sábado. La indignación viene de los tres goles anulados, especialmente de dos de ellos. El primero, el 1-0 anotado por Mbappé y que fue anulado por un fuera de juego milimétrico, apenas unos centímetros de hombro y de cabeza. Con el fuera de juego semiautomático se suponía que el tema de la posición antirreglamentaria estaría solventado, pero en el Madrid creen que sigue existiendo un mínimo margen de discrecionalidad con el momento en que se selecciona el frame televisivo para hacer la simulación. En el último Mundial, esa discrecionalidad ya no existía, pues el balón llevaba integrado un chip que mandaba una señal en cuanto sentía el contacto. Todo quedaba en manos de la tecnología, pero en LaLiga de momento eso no sucede y al Madrid ya le sirve para creer que en estos casos hay margen para perjudicarle.
Pero el enfado principalmente viene por el tanto anulado a Güler por una mano no inmediata al momento del gol (hubo de por medio una parada de Leo Román y un nuevo tiro del turco); Iturralde González, árbitro especialista de AS y de la Cadena SER, confirmó el error de Sánchez Martínez, que interpretó como inmediata una acción que, con el reglamento en la mano y con las circulares aclaratorias relativas a dicha norma, no fue así.
Son dos jugadas que han sentado mal en Valdebebas pero, como ya decíamos, al mismo tiempo han resultado reconfortantes en la medida en que confirman las sensaciones que tenía el Madrid en torno al nuevo Comité Técnico de Árbitros (CTA). Creen en el club blanco que los cambios que se han realizado, con las salidas de Medina Cantalejo y Clos Gómez y la llegada del nuevo presidente, Fran Soto, han sido estéticos y sin significado.
En opinión del Madrid, siguen en el CTA árbitros de la etapa de Negreira como Fernández Borbalán (Director Técnico) y Prieto Iglesias (Director del VAR); mientras siga habiendo representantes de esa época, el Madrid no se sentirá tranquilo. En RMTV lo resumieron así: “En Matrix, ha acabado 2-1, pero en el mundo real ha sido 5-1…”.
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