Messi comanda otro recital

El capitán de la albiceleste se centró en la creación de juego y manejó a los suyos hacia otra goleada con muy poca oposición por parte de Puerto Rico.

Argentina pasó por encima de Puerto Rico con un Messi brillante en la dirección del juego, en las primeras acciones situado cerca de los centrocampistas y más adelante en los metros finales. El capitán y guía de la campeona del mundo, jugó el partido completo y sumó un plácido triunfo para alargar su gran momento y acercarse al Mundial con plenas garantías.

Para sorpresa de todos la primera ocasión del partido la tuvo Antonetti, que robó un balón de Messi en campo propio y no se lo pensó para armar un disparo de 60 metros que el Dibu sacó ya bajo palos y forzado.

Poco después Mac Allister sería el encargado de abrir el marcador. Messi mandó un disparo al travesaño y en la continuación Nico González, de volea, dirigió de nuevo la pelota hacia el arco. El del Liverpool apareció para desviar la pelota a la red. Con la ventaja en el marcador Argentina puso una marcha más, robó rápido en campo contrario y Messi sumó una asistencia con un pase magnífico que finalizó Montiel con una volea aún mejor.

A los 36 minutos llegó el doblete de Mac Allister en una gran acción colectiva que arrancó Messi, continuó González y después Flaco puso la magia con una pisada en el área que dejó en bandeja el disparo del centrocampista, que no perdonó. Con esa clara ventaja a favor el Dibu fue exigido de nuevo y dejó una doble atajada soberbia, donde la zurda de Rivero lo puso a prueba.

Debutantes y más goles

Tras el descanso Scaloni hizo debutar a Rivero y Moreno y luego entraron Lautaro y Montiel. Tras ese segundo doble cambio cayó el cuarto tanto, anotado en propia puerta por parte de Echeverría. Messi seguía en cancha y en el tramo final sí que buscó su gol con insistencia pero sin premio. Cutler dejó una gran parada a disparo suyo y en otras acciones la zaga lo frenó.

A falta de goles Messi se centro en generar ydejó otro pase entre líneas exquisito para una nueva llegada de Nico González, que dejó el balón suelto para la zona donde Lautaro no iba a perdonar con una cómoda definición. Unos instantes después el propio Messi sumaría la asistencia al dejar un pase atrás que transformó el delantero del Inter para cerrar la goleada.