La Copa de la Liga 2021, el nuevo torneo del fútbol argentino, no tuvo el mejor inicio para los equipos denominados grandes.
Dentro de ese grupo, el único que pudo ganar fue San Lorenzo, frente a Arsenal de Sarandí, en el estreno oficial de Diego Dabove como entrenador.
Los otros dos entrenadores que debutaron en sus respectivos equipos, Juan Antonio Pizzi en Racing y Julio Falcioni en Independiente, también cayeron.
La Academia padeció la continuidad del buen momento de Banfield, subcampeón de la Copa Diego Maradona, y perdió 2-0 en el estadio Florencio Sola.
Independiente, por su parte, dejó más dudas que certezas frente a Lanús y terminó cayendo por 1-0, en un juego en el que entregó pocas respuestas.
Hasta River, semifinalista de la pasada Copa Libertadores y catalogado como uno de los mejores equipos de Sudamérica, no pudo sumar de a tres unidades.
De hecho, el equipo de Marcelo Gallardo no cosechó ningún punto en La Plata, donde pagó caro una serie de desatenciones y perdió frente a un Estudiantes que jugó todo el segundo tiempo con un hombre menos.
Entre ganadores y perdedores quedó Boca Juniors. El último bicampeón del fútbol argentino rescató un empate en los últimos minutos ante Gimnasia y Esgrima La Plata.
En La Bombonera, el Xeneize, también semifinalista de la última Libertadores, tampoco mostró su mejor versión.
El comienzo de la Copa de La Liga expuso que no será tarea sencilla para los denominados equipos grandes alcanzar el título.
La imposibilidad de erogar grandes sumar de dinero para realizar contrataciones resonantes, parece reducir a brecha que, en teoría, existe entre unos y otros.