Gilda y Adrián Otero tienen varios puntos en común: fueron músicos populares, fallecieron trágicamente en accidentes de tráfico siendo jóvenes y sus éxitos mantienen vigencia y son escuchados y coreados hasta la actualidad. Además, ambos eran hinchas de Vélez.
Por eso, desde la Subcomisión del Hincha de Vélez se les rindió un homenaje, con un mural ubicado frente a la entrada al Polideportivo del club de Liniers, en la esquina de Juan B. Justo y Elpidio González.
El mural con las caras de Gilda y Otero y una frase alusiva de cada uno de ellos relacionado con su pasión por Vélez, mide 8 metros de ancho por 3 de largo y los fondos para realizar la obra se recaudaron con la venta de 500 bonos entre socios e hinchas.
Al acto de inauguración concurrieron dos familiares directos de los fallecidos músicos: Laura Cebrian, prima de Gilda, y Julián Otero, hijo de la inolvidable voz de Memphis la Blusera.
La pariente de la cantante y compositora de cumbia -fallecida a los 34 años- manifestó: “La verdad que es un mimo hermoso para nosotros. Nunca nos deja de sorprender que luego de 24 años del accidente, se sigan haciendo este tipo de manifestaciones de amor. Nos llena el alma que Vélez haya realizado todo esto y cada vez que pase por acá me voy a emocionar al verla”.
Por su parte del músico de rock, soul y blues -fallecido a los 53 años- aseguró: “Mi viejo siempre estuvo cerca del club. Fue representante de socios, se paraba en la puerta de la sede y hablaba con todos. Amaba Vélez y ese amor me lo transmitió a mí y yo a mis hijos, Juan y Catalina”. Adrián Otero cantó el Día del Centenario, en 2010, en el estadio Amalfitani y Julián fue su baterista.