Universidad Católica de Chile dejó a Vélez sin invicto en Liniers, en esta edición de la Copa Sudamericana, al imponerse por 2-1 en el primer juego válido por los cuartos de final.
El delantero argentino Fernando Zampedri, en la última acción del capítulo inicial, comenzó a inclinar la balanza en favor del conjunto chileno que conduce Ariel Holan.
Los Cruzados ampliaron la ventaja en el complemento por intermedio de Edson Puch, pero Juan Martín Lucero, cerca del cierre del juego, descontó de cabeza y salvó a Vélez de quedar muy relegado en la serie.
Un arranque de Almada quebró la intrascendencia inicial. El habilidoso jugador del Fortín gambeteó en velocidad, por la derecha, y sacó un remate que salió cerca, a los 21 minutos.
Hasta ese momento, Vélez y Universidad Católica se habían cuidado, estudiado y medido. Ambos tomaron sus recaudos.
El VAR, como sucedió en el primer partido con Deportivo Cali, fue nuevamente protagonista (con sus ya habituales demoras), en dos jugadas puntuales del primer tiempo.
Una mala salida del arquero local Alexander Domínguez sobre Gastón Lezcano, con la pierna en alto, continuó con el delantero picando la pelota antes de caer. El intento del argentino salió por encima del arco y el VAR salvó al arquero de una tarjeta.
La siguiente intervención tecnológica llegó a los 28 minutos, con un frentazo de Lautaro Giannetti y toque de Lucas Janson que el arquero Matías Dituro atrapó en el piso.
El equipo arbitral determinó que el balón no cruzó por completo la línea de gol, aunque la decisión dejó espacio para las dudas, porque ninguna de las tomas televisivas entregó la claridad suficiente para resolver con exactitud. Se trató de una jugada milimétrica.
El primer tiempo parecía extinguirse sin conquistas, pero en tiempo de descuento, una falla defensiva local le permitió a Universidad Católica abrir el marcador.
Alfonso Parot aprovechó un mal pase y las dudas del local, y envió un centro al área. Allí, después de un desvío clave de José Fuenzalida de cabeza, Zampedri ratificó su capacidad goleadora, ganándole al Ortega y sometiendo al ecuatoriano Domínguez con un toque al fondo del arco.
Un ataque rápido y una defensa lenta sentenciaron la historia a los 4 minutos del segundo tiempo. La definición de Edson Puch, ex Huracán, incrementó la ventaja y la llevó a dos goles, y derribó la confianza de Vélez.
A las imprecisiones, nervios y falta de reacción y rebeldía, al conjunto de Mauricio Pellegrino se le sumó otro problema: Almada, su futbolista más desequilibrante y clave para pasar fases en esta Sudamericana, salió lesionado al los 6 minutos.
Jamás encontró el rumbo Vélez. Fue para adelante por obligación, pero sin ideas ni convicción. Y cuando la eliminación de esta Copa estaba a la vuelta de la esquina, llegó el gol de la ilusión.
El descuento derivó de un centro de Janson, un posterior cabezazo de Tarragona y la aparición de Lucero por detrás, sobre la hora, para empujar de palomita. Nuevamente apareció el VAR y su larga demora, para determinar que el goleador no estaba adelantado.
El desquite se disputará dentro de siete días en Chile y Vélez deberá pensar, cómo mínimo, en marcar dos goles, para conservar las chances de pasar a las semifinales.
En esa instancia, el ganador de esta serie jugará con el triunfador de la eliminatoria que protagonizarán Lanús e Independiente.
Síntesis:
Vélez: Alexander Domínguez; Tomás Guidara, Lautaro Giannetti, Luis Abram, Francisco Ortega; Hernán De La Fuente, Agustín Mulet, Federico Mancuello; Thaigo Almada, Cristian Tarragona y Lucas Janson. Director técnico: Mauricio Pellegrino.
Universidad Católica: Matías Dituro; Raimundo Rebolledo, Germán Lanaro, Valber Huerta, Alfonso Parot; Ignacio Saavedra, Luciano Aued; José Fuenzalida, Édson Puch, Gastón Lezcano; y Fernando Zampedri. Director técnico: Ariel Holan.
Gol, en el primer tiempo: 49m, Zampedri (UC).
Gol, en el segundo tiempo: 4m, Puch (UC); 44m, Lucero (V).
Cambios, en el segundo tiempo: al reinicio, Ricardo Centurión por De La Fuente (V); 6m, Juan Martín Lucero por Almada (V); 36m, Diego Valencia por Lezcano (UC) y César Munder por Puch (UC); 40m, Agustín Bouzat por Mulet (V).
Árbitro: Bruno Arleu (Brasil).
Estadio: José Amalfitani.