Tenía solo 16 años Javier Saviola cuando, repentinamente, tuvo que ingresar al campo de juego para reemplazar a Christian Castillo, que se había lesionado, en la visita de River a Gimnasia y Esgrima de Jujuy.
Poco después, Saviola quedó ante el momento que seguramente soñó muchas noches: el colombiano Juan Pablo Ángel lo dejó cara a cara con el gol, y el Conejito, con un derechazo cruzado, convirtió el empate en un encuentro que, finalmente, fue empate 2-2.
Fue el primer peldaño de una exitosa carrera para Saviola, que luego de su primera etapa en River vistió las camisetas de Barcelona, Mónaco, Sevilla, Real Madrid, Benfica, Málaga, Olympiacos, Hellas Verona. Finalmente, completó el círculo y se retiró en el club de Núñez.