El tenista español Rafael Nadal escribió hoy un nuevo capítulo de su gloriosa historia deportiva, al conquistar su décimo tercer título de campeón de Roland Garros, al imponerse en la final al serbio Novak Djokovic.
Nadal (2) se impuso a Djokovic (1) por 6-0, 6-2, y 7-5, en 2 horas 41 minutos, y de ese modo consiguió su victoria número 100 en el Grand Slam que se juega sobre polvo de ladrillo.
Además de lograr una nueva corona en Roland Garros, Nadal sumó su vigésimo título de Gran Slam, y de esa manera se convirtió, junto al suizo Roger Federer como los más ganadores de ese tipo de torneos.
La final esperada no fue tal durante la mayor parte de su desarrollo, pura y exclusivamente por la manera arrolladora en que jugó Nadal, lo cual no le dio ningún tipo de chances a un Djokovic que no pudo aprovechar alguna situación que se le presentó.
En apenas 20 minutos de juego, Nadal le quebró dos veces el saque a Djokovic y se puso 3-0, en base a la potencia de su derecha, y el revés para defender.
En el cuarto game, “Nole” tuvo sus tres primeras opciones de quiebre, pero Nadal levantó las tres, y se puso 4-0. Antes de que Djokovic se diera cuenta qué había pasado, el español volvió a quebrar el saque de su rival, mantuvo el suyo, y se llevó el set 6-0 en 48 minutos.
En el arranque del segundo set, Djokovic ganó con su saque el primer game, y pareció entonces que se abría el partido esperado. Pero no. Nadal seguía imponiendo sus condiciones desde el fondo de la cancha, y en muy pocas ocasiones los cambios de ritmo que intentó el serbio, especialmente a través del dropshot, surgían efecto.
El español logró un nuevo quiebre en el tercer game, se puso 3-1 con su saque, y logró escaparle a las opciones que tuvo Djokovic, para llevarse el segundo parcial en 51 minutos.
En el tercet set finalmente se vio la final esperada. “Nole” incomodó a Nadal con sus golpes, especialmente el saque, algo que no le había funcionado durante los dos primeros parciales.
Pero Nadal estaba lejos de ser desbordado por la mejoría de Djokovic, y lo dejó claro cuando en el quinto game se quedó con el saque del serbio. Pero a diferencia de las mangas anteriores, “Nole” respondió inmediatamente y recuperó el quiebre en el sexto game.
Fue palo y palo hasta el 5-5, y ahí volvió a aparecer Nadal con la potencia de sus golpes desde el fondo de la cancha, obligando a Djokovic a pegar apurado, o recurriendo a golpes de alto riesgo.
Y así fue entonces que el español quebró para ponerse 6-5, y definir el juego con su servicio, dejando en 0 al número 1 del mundo.
Nadal hizo fácil un partido que en la teoría parecía más complicado, y ratificó que es el mejor jugador sobre polvo de ladrillo de la historia.
Foto: @rolandgarros