Gustavo Alfaro asumió hoy un nuevo e inédito desafío. El experimenado entrenador, que estuvo sin trabajo durante todo este año después de su paso por Boca Juniors, tomó las riendas del seleccionado de Ecuador.
“Yo no vine acá a cumplir un contrato de trabajo, yo vine a vivir la mejor etapa de mi vida profesional“, advirtió el técnico rafaelino en su presentación.
Alfaro, confirmado para este nuevo cargo el pasado 26 de agosto, reemplazará en Ecuador al neerlandés Jordi Cruyff, quien se marchó sin dirigir siquiera un partido.
El entrenador argentino de 58 años llegó esta madrugada a aquel país y por la tarde dialogó con la prensa junto al presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, Francisco Egas Larreátegui.
“Mi cuerpo técnico y yo haremos todo lo posible para que Ecuador esté en la próxima Copa del Mundo”, prometió Alfaro.
Su cuerpo técnico estará conformado por Carlos González y Claudio Cristofanelli como ayudantes de campo, Sergio Chiarelli y Pedro Arbelaiz como preparadores físicos y Alejandro Monograsso, como analista de videos.
Rafaela, Patronato, Quilmes, Belgrano, Olimpo, San Lorenzo, Arsenal, Rosario Central, Al-Ahli Arabuia Saudita, Tigre, Gimnasia y Esgrima La Plata, Huracán y Boca, fue el sendero que el entrenador santafesino transitó antes de asumir su primer desafío como seleccionador.
En principio, Ecuador es el primer obstáculo que tendrá por delante el seleccionado argentino en su camino hacia el Mundial de Qatar 2022.
De todos modos, la fecha del 8 de octubre pactada para ese partido a disputarse en La Bombonera todavía cuenta con un signo de interrogantes, pese a la ratificación de FIFA, por el estado de situación de la pandemia de Covid-19 en Sudamérica.
En esa dirección, Alfaro se refirió a la eventual presencia de Lionel Messi en ese encuentro: “No es lo mismo que esté o no, pero la Argentina con o sin Messi puede tener un gran nivel“.
“Logró una estructura que contiene a los jugadores, más allá de los detalles. Hizo grupo para adentro y esa es una ventaja”, analizó.