Fabricio Bustos, el hombre que evitó en el descuento ante Fortaleza que la crisis de Independiente se profundizara, habló hoy tras el regreso del plantel del Rojo a Buenos Aires.
“Fue un desahogo muy grande, en ese momento solo pensamos en festejar”, confió en rueda de prensa el lateral que metió el 1-2 en Brasil y logró el pase a la Segunda Fase de la Copa Sudamericana.
No vienen bien las cosas en el club de Independiente, tanto a nivel institucional como deportivo, y la dura derrota en el clásico ante Racing Club había marcado un quiebre en la relación entre los hinchas y el equipo. Por eso Bustos destacó el valor “anímico” de la clasificación agónica.
“Por suerte en el minuto 93 pudimos hacer el gol y clasificar. Siempre tratamos de salir adelante, más allá de que se nos había puesto muy difícil el partido. Sirve para agarrar un poco de confianza para lo que viene. Es un punto de inflexión en lo anímico, pero creo que tenemos que mejorar mucho en la parte futbolística”, resaltó.
La clave, para el defensor, estuvo en haber estado “en partido constantemente”.
“En las copas es así. Por momentos vas a jugar bien, en otros mal, pero lo importante es pasar, y más en este club”, consideró.
Finalmente, Bustos se tomó un tiempo para elogiar al juvenil Alan Velasco, quien se tomó un tiempo en medio de la desesperación para asistirlo en la jugada del gol.
“Alan tiene un pedo en la cabeza, es así, es su manera de ser. Me parece muy bien que se anime y que juegue. Lucas (Pusineri) lo está llevando de a poquito y es muy bueno que lo pueda hacer bien”, concluyó.