Editor IAM
Huracán derrotó a Boca Juniors 1-0, en el estadio Tomás Adolfo Ducó, por la tercera fecha del Grupo A del Torneo Clausura. El Globo fue superior, controló el partido, dispuso de las mejores ocasiones ante un Boca que sigue decepcionando y mostrando un bajísimo nivel de juego.
Mientras Huracán se recuperó tras dos derrotas (con Belgrano y con Estudiantes) en las dos primeras fechas de este torneo, el Xeneize con 11 partidos sin ganar, registró su peor racha de la historia.
El local impuso su ritmo y manejó la pelota casi a voluntad ante un rival apático y sin reacción. Y si no se puso rápido en ventaja se debió a la gran actuación de Agustín Marchesín, quien tuvo intervenciones salvadoras. Además del travesaño, donde pegó un disparo de Rodrigo Cabral.
Así con Marchesín como figura y Huracán dominando casi a voluntad, hubo que esperar hasta el minuto 20 del segundo tiempo para que la realidad se asociase al resultado. Un golazo de Matko Miljevic, el mejor de la cancha, con un derechazo de afuera del área desató el festejo en Parque Patricios.
Nada cambió, aparte de la celebración y la sensación de justicia, porque Huracán siguió desplegando su superioridad y Boca no salió de su inoperancia y falta de ideas.
Una muestra curiosa del presente nebuloso del equipo de Miguel Russo se dio en el arranque del segundo tiempo. Miguel Merentiel se sorprendió al ver que debía salir reemplazado, antes de ponerse en marcha el juego. El delantero uruguayo se fue disgustado y directamente al vestuario. Nadie le avisó en el entretiempo, que iba a salir…
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