Las diferentes variantes que Ancelotti puede plantearse para la recomponer la defensa en el Etihad abren paso a Camavinga en el centro del campo.
Donde dijo digo, ya veremos si Ancelotti dice Diego. El técnico italiano prácticamente descartó en Leganés la posibilidad de alinear a la vez en la defensa a Valverde y Tchouameni. “Es complicado pensar que Valverde y Tchouameni jueguen los dos en la línea de atrás”, afirmó Carletto. Pero una nueva emergencia, la lesión de Lucas Vázquez, puede hacer que ese escenario no contemplado se convierta en realidad. Y que provoque un efecto dominó en el que el beneficiado, con un puesto casi fijo en el once en el centro del campo, sería Camavinga.
Ancelotti no tiene en defensa muchas opciones probadas. Tiene disponibles dos laterales izquierdos, Mendy y Fran García, y Asensio. Y se lleva a Jacobo, un central, y a Lorenzo, un lateral derecho. La opción de este último sería la más ortodoxa en cuanto a colocar a un especialista en esa posición. Pero sería una apuesta, si no arriesgada, sí al menos atrevida: en el primer equipo sólo acredita la experiencia del partido de Copa contra la Deportiva Minera.
Segunda alternativa: recuperar un experimento que ya le resultó fallido a Zidane hace cuatro años (en la derrota 2-3 ante el Shakhtar Donetsk en el Di Stéfano) y volcar a Mendy en el lateral derecho. Un jugador que conoce el oficio de lateral, pero ejerciéndolo en el costado opuesto al que está acostumbrado. Y la tercera, desdecirse de lo que parecía imposible hace cinco días: coincidan Valverde en el lateral derecho, una solución ya verificada, y Tchouameni como central.
De entrada, cualquier variante que incluya a Tchouameni en la defensa –y su concurso como central parece asegurado- reduce la competencia en el centro del campo. La última, deja tres candidatos para dos puestos: Modric, Ceballos y el propio Camavinga. Porque parece que los Cuatro Fantásticos (Mbappé, Vinicius, Rodrygo y Bellingham) son irrenunciables para Ancelotti. “No comparto la idea de que, para ser equilibrados, tenga que quitar a uno, dos o tres delanteros. Porque yo puedo buscar el equilibrio quitando a los cuatro, pongo a cuatro medios, presiono más… pero no marco 60 goles. Sencillo”, sentenciaba el entrenador en la previa del derbi, donde resolvió el compromiso ajustando el sistema. “Puede valer el esquema. Hemos hecho dos líneas de cuatro, con Bellingham más por fuera”, explicaba después del partido sobre un 4-4-2 en el que el inglés y Rodrygo taparon las bandas.
Sólo queda por ver cómo resuelve Ancelotti en el Etihad el puzle del centro del campo para discutirle el balón al City y cómo la composición de la defensa condiciona la medular. Pero Camavinga cuenta con muchas papeletas para recuperar a la titularidad después de reaparecer con diez minutos en el derbi.
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