Talleres perdió con Sao Paulo 2-0, en el estadio Morumbi, por la sexta y última fecha del Grupo B de la Copa Libertadores. El equipo de Córdoba se quedó sin invicto y sin primer puesto, aunque ya tenía asegurada su clasificación a la siguiente fase.
Al final del partido hubo una pelea entre jugadores de Talleres y la policía. El problema se había originado en el final del período inicial cuando Lautaro Morales, arquero suplente de la T, mientras era parte de un grupo que reclamaba al árbitro, fue golpeado por un uniformado con su escudo. Varios compañeros reclamaron, entre ellos uno de los vehementes fue Guido Herrera, y hubo empujones, insultos y manotazos.
Parecía que todo había terminado ahí. Pero al finalizar el cotejo, los policías se llevaron, en condición de demorados, a los dos arqueros de Talleres, quienes debieron prestar declaración ante un juez.
Al margen de este escándalo, Sao Paulo y Talleres estaban disputando un partido parejo, hasta que a los 43 minutos del primer tiempo, Valentin Depietri le cometió una falta, dentro del área, a Rodrigo Nestor. Luca Moura pateó el penal y Guido Herrera lo atajó, sin embargo volvió a repetirse porque el arquero se adelantó. En su segunda oportunidad, Luca Moura no falló y Sao Paulo se fue al descanso 1-0 arriba.
El segundo tanto local también llegó al final, esta vez del segundo tiempo. Un golazo de Luciano, que incluyó un caño a Ruben Botta y un magnifico remate, selló el resultado en el minuto 90.
Sao Paulo y Talleres sumaron 13 puntos, pero los brasileños quedaron primeros por mejor diferencia de gol: +7 a +4. Barcelona quedó con 6 y Cobresal con 1.