Olimpia le ganó a Flamengo 3-1, en el estadio Defensores del Chaco, en el partido de vuelta por los octavos de final de la Copa Libertadores y dio la sorpresa. El equipo brasileño (campeón vigente de la Libertadores), que había ganado 1-0 en la ida, recibió insultos, amenazas y proyectiles de la barra de su club, en el aeropuerto de Rio de Janeiro, a su regreso.
Jorge Sampaoli, el técnico argentino de Flamengo, fue expulsado durante el partido y recibió gran parte de las críticas de los hinchas. Su continuidad, luego de esta eliminación, está en duda.
Había comenzado con una sonrisa el partido para los cariocas: Bruno Henrique abrió el marcador con apenas 6 minutos de juego. Sin embargo, Olimpia reaccionó y empató, cinco minutos más tarde, con un cabezazo de Iván Torres.
En el segundo tiempo, Richard Ortiz, también de cabeza, anotó el segundo tanto del equipo paraguayo, a los 23 minutos. Y la explosión llegó con otro cabezazo, del delantero argentino Facundo Bruera (ex Independiente Rivadavia, Quilmes y Brown de Adrogué), a los 34 minutos.
Esta mañana, cuando arribaron al aeropuerto de Rio de Janeiro, el cuerpo técnico y jugadores de Flamengo fueron increpados por la barra brava, que los amenazó y arrojó latas, botellas y piedras. “Se acabó el amor, esto se va a convertir en un infierno“, cantaban los enardecidos hinchas. La policía impidió el contacto con los futbolistas y dispersó a los hinchas con gas pimienta.