Tras los adioses, la reconstrucción. El Real Madrid tiene ocho plazas en el aire. De Nacho y Ceballos a Brahim, Lunin y Álvaro Rodríguez. Mucho frente abierto.
Termina una temporada que abre paso, en el Real Madrid, a un verano más complejo de lo esperado incluso por el propio club. La salida de Benzema, el ‘no’ de Asensio a la renovación, un Nacho con más de un pie fuera y jugadores en la rampa de salida con los que se cuenta pero quieren salir (Lunin) o hacer caja (Mendy) abre un abanico de incógnitas. Sólo hay quince futbolistas fijos en los planes de la próxima campaña y uno de ellos será un recién incorporado: Fran García.
La regeneración del equipo ha pasado a ser una labor que va mucho más allá de un fichaje estratégico como Bellingham. Ahora la entidad necesita acudir al mercado a cubrir todas las líneas y en algunas, por duplicado (o triplicado).
Sólo catorce confirmados para el próximo curso…
En estos momentos únicamente catorce futbolistas tienen taquilla asegurada para la próxima temporada en Valdebebas. Courtois, Carvajal, Militao, Alaba, Rüdiger, Lucas Vázquez, Fran García, Camavinga, Kroos, Modric, Tchouameni, Valverde, Rodrygo y Vinicius. El club no quiere desprenderse de ellos y ellos, por ahora, no se han pronunciado en sentido contrario. El Madrid tiene la columna vertebral casi intacta con pilares atados bajo contratos largos, intocables. Desde Courtois (2026) a Camavinga, Valverde y Vinicius (2027) pasando por Militao y Rodrygo (ambos hasta 2028). Se espera más de Tchouameni en la transición a su segundo año, que emule una mejoría parecida a la que experimentó en una situación análoga Camavinga. Veteranísimos como Modric y Kroos podrán seguir aportando calidad en su last dance particular.
Nacho, Ceballos, Lunin, Brahim… las dudas del proyecto
El Madrid tiene que ponerse a trabajar de una manera ciertamente incómoda, porque hay dos suplentes que acaban contrato y que el club quiere que sigan pero que siguen sin transmitir su decisión: Nacho, que se hizo fotos con sus trofeos en el césped del Bernabéu, y Ceballos, que como comentó Ancelotti “se lo está pensando”. El club es muy sensible al peso de Nacho como segundo capitán y canterano ejemplar, por lo que no se le está apremiando. Ceballos es un caso distinto, porque como informó AS además de la propuesta blanca tiene dos ofertas más interesantes de equipos Champions. El utrerano debe decidir si acepta seguir en una condición bastante similar a la actual (en sueldo y en función dentro del equipo) o buscar otros pastos.
Son los nombres más rumbosos, pero hay otros seis más también en el aire. Lunin sigue pensando en salir este verano, a Odriozola se le buscará destino (acaba en 2024), Vallejo volverá a recibir el consejo de salir (aunque no parece por la labor) y el Madrid está más que abierto a recibir ofertas por Mendy. Más peliaguda es la toma de decisión firme sobre Brahim, con el que se cuenta pero cuyo cartel en Italia le hace candidato a posible venta. También queda por conocerse el destino final de Álvaro Rodríguez. Ancelotti se atrevió a proclamarlo jugador de la primera plantilla para la próxima temporada, pero eso fue antes del terremoto con Benzema y el fichaje tan avanzado de Joselu. Al Toro uruguayo se le planteará una opción mixta. Estar en dinámica del primer equipo pero tener ficha con el Castilla.
Un ataque desnudo
Porque el Madrid va a ir con todo al mercado de delanteros. Sólo tiene dos delanteros, Vini y Rodry. Y Ancelotti, aunque dice que se buscarán con calma, reclama públicamente gol. Brahim, de quedarse definitivamente, podría aportar su cuota (en 124 partidos con el Milan, 18 goles) pero no cargar con peso específico en esa materia. Joselu sí está llamado a sumar algo más porque es especialista (31 tantos en las dos últimas temporadas entre Alavés y Espanyol). Pero el Madrid es consciente de que le hacen falta una o dos referencias más en la punta de lanza y con experiencia europea. Su idea de hacerse con Harry Kane y/o Havertz ha pasado a adquirir, ahora, un peso decisivo en las aspiraciones madridistas para la 2023-14.
AS