El delantero sueco volvió a jugar casi 9 meses después de su grave lesión, tras una rotura del ligamento cruzado de la rodilla izquierda.
Ayer Ibrahimovic volvió a sentirse futbolista. En el final de la pasada temporada, el delantero sueco se produjo una grave lesión tras romperse el ligamento cruzado de su rodilla izquierda, que dejaba en el aire si el delantero volvería a jugar al fútbol, ya que en la actualidad el delantero sueco tiene ya 41 años. Él se propuso volver a jugar al fútbol y ayer, en el partido ante la Atalanta, jugó poco más de 15 minutos, dejando atrás 9 meses de sufrimiento.
Al finalizar el encuentro, Ibrahimovic, habló para los medios italianos y aseguró que no se recuperó para ser un jugador de banquillo y solo seguirá jugando al fútbol si puede ayudar al equipo: “Echaba mucho de menos este estadio, la afición me da fuerza y adrenalina. Quiero competir con mis compañeros y jugar, sino no me quedaría en casa. No estoy aquí para jugar solo los últimos diez minutos de los partidos, eso significaría que estoy acabado. Si es así, prefiero quedarme en casa. Creo que puedo jugar todo el partido, no los últimos cinco minutos”, aseguró el sueco.
El delantero del Milan repasa lo mal que lo pasó en el tiempo que ha estado fuera de los terrenos de juego: “He sufrido mucho en los últimos seis meses. Quería ayudar a toda costa y no podía. Entendí que cuando no estás bien no puedes ayudar al equipo. Lo intenté por todos los medios. Nunca había sufrido tanto como yo Sufrí por el Scudetto de Milán. Fue un año difícil”
También tuvo tiempo de hablar sobre la posible renovación de Leao: “Me bajé el sueldo por él, juego gratis. ¿También quiere la casa? (en tono de broma). Cada entrenamiento mejoro más y más, tiene un gran futuro” terminó diciendo Ibra en su vuelta a los terrenos de juego.
AS