El domingo 20 de noviembre Qatar-Ecuador, en el estadio Al Bayt, en la ciudad de Al Khor a las 17 horas local, darán inicio a un Campeonato Mundial novedoso. Será el primero en disputarse en el último tramo del año -siempre se disputó en los meses de junio y julio- y el segundo en una nación asiática, luego de Japón-Corea del Sur 2022.
Los 32 seleccionados que competirán en esta vigesimosegunda edición del máximo evento futbolístico internacional quedaron divididos, según determinó el sorteo de los equipos separados en bombos de acuerdo a su potencial, en ocho grupos de cuatro conjuntos cada uno.
Los dos primeros de cada grupo avanzarán a los octavos de final. Y allí comenzará la etapa decisiva, con partidos eliminatorias. El “verdadero” Mundial, según afirman muchos.
El Grupo A albergará a Qatar, debutante absoluto en un Mundial y clasificado automáticamente por
ser el país anfitrión. Los locales, más allá de su mucha o poca tradición en el mundo de la pelota, suelen cumplir buenas performances en su casa y ante su público. ¿Lo conseguirá Qatar en esta edición?
Dirigida técnicamente por el español Félix Sánchez Bas, conductor en el único título internacional de Qatar -la Copa de Asia 2019-, buscará cumplir un buen papel en su territorio, aunque no será sencillo. Sus figuras son los delanteros Assan Al Haidos y Almoez Alí.
Países Bajos, subcampeón mundial en tres ocasiones, asoma como el gran favorito a adueñarse de este grupo. Los neerlandeses, conducidos por el histórico entrenador Louis Van Gaal y con futbolistas consagrados en grandes clubes europeos como Memphis Depay, Virgil Van Dijk y Matthijs De Ligt.
Ecuador, dirigida por el argentino Gustavo Alfaro, y Senegal, campeón de la Copa África, tienen potencial para avanzar de fase y entre ellos, seguramente, se dará una ardua lucha por esa segunda plaza.
Los ecuatorianos presentarán la base que obtuvo el pasaje, luego de su ausencia en Rusia 2018, en las eliminatorias sudamericanas combinando experiencia con juventud. Pervis Estupiñán, lateral izquierdo, y el volante Moisés Caicedo, ambos del Brighton & Hove Albion de la Premier League inglesa y compañeros del argentino Alexis Mac Allister, son sus figuras.
Los africanos cuentan con un delantero de excelente nivel: Sadio Mané, ex Liverpool y actual Bayern Munich, y plantel de jugadores que actúan en clubes europeos. Y también, un feliz antecedente en Mundiales: en 2002 Senegal debutó superando al reinante campeón Francia y llegando hasta cuartos de final.