En la previa del partido frente a Boca, por la segunda fecha de la Copa de la Liga Profesional, Aldosivi expresó abiertamente, sin medias tintas, su descontento por el estado del estadio José María Minella de Mar del Plata, escenario de ese juego. Lo hizo a través de su vicepresidente, José Marcelo Moscuzza, quien cuestionó la inexistente comunicación con el Municipio, que no solo “no hace nada” para corregir los problemas, sino que, además, pone “palos en la rueda”.
“Es una vergüenza el estadio. Me duele porque uno como marplatense quisiera tener un estadio acorde. Pero el Municipio no hace nada para que esto cambie y uno siente como que no quieren tener un equipo de Mar del Plata en Primera”, disparó el dirigente del Tiburón.
Claro que su malestar, en gran parte, se debe a la suma de dinero que Aldosivi perdió en esta oportunidad por la imposibilidad de vender localidades para la platea techada del estadio, que se encuentra clausurada desde septiembre pasado por presuntas fallas estructurales. Según precisó, el club marplatense se privó de embolsar unos 100 mil dólares.
“Tuvimos una pérdida millonaria porque podríamos haber vendido el doble de entradas y por tener inhabilitada la platea techada no pudimos. El campo de juego también está malo, no tiene riego por aspersión. Recién lo fui a saludar a Cauteruccio y se llovía dentro del vestuario”, describió Moscuzza.
Al mismo tiempo, el dirigente lamentó que “lo peor es que nadie hace nada y si uno se va a afuera de Mar del Plata a jugar, la culpa es de los dirigentes”.
Moscuzza: “Me arrepiento de no cambiar de estadio”
De hecho, fue esa una posibilidad que se barajó en el club: “Hicimos averiguaciones para jugar en Independiente, pero no se habilitaba la venta de visitantes, que es algo que hay que modificar. Es hora que cada equipo decida si quiere visitantes o no”. En el Minella, habrá hinchas denominados neutrales.
“Me arrepiento de no haber llevado el partido a Avellaneda, no solo por lo económico sino porque no recibí ningún llamado del Municipio a ver si necesitábamos algo. Al contrario, fueron todos palos en la rueda”, sentenció y aclaró que no se trata de un inconveniente con las autoridades actuales porque “ningún gobierno se ocupó de hacer nada”.
Un estadio con historia
Según precisa el sitio web del Municipio de General Pueyrredón, el José María Minella, construido para el Mundial de Argentina 78, se encuentra en el sector oeste del Complejo Municipal de Deportes “Teodoro Bronzini”, sobre la Avenida de las Olimpíadas, y posee una capacidad máxima aproximada de 35.180 localidades, contando los 6691 lugares de la platea techada, actualmente inhabilitada.
Además de albergar encuentros de aquel torneo, el estadio marplatense recibió los XII Juegos Panamericanos Mar del Plata 1995, el Mundial Sub 20 de 2001 y el Seven Internacional de Rugby.