Después del 4-5, se produjo un momento de tensión en el que tuvo que intervenir la policía para separar al futbolista brasileño y a los del equipo portugués.
El partido loco, el final loco del Benfica-Barça, tuvo continuación cuando el holandés Makkelie pitó el final. Raphinha, autor del 3-2 y del 4-5, se encaró con los jugadores encarnados, que según el brasileño le habían insultado. La Policía tuvo que intervenir para calmar los ánimos, caldeados después de que el Benfica viese cómo el Barça le daba la vuelta al partido.
Los jugadores del Barça también actuaron y se llevaron a Raphinha. Ahora habrá que estar atentos al informe que puedan hacer tanto los árbitros como los comisarios de la UEFA. Raphinha, como es conocido, jugó en el Sporting de Portugal, eterno rival de ciudad del Benfica.
“Yo respeto a todos. Cuando salí del campo hay gente que me ha insultado, yo he devuelto los insultos, sé que no lo debo hacer. Nos calentamos todos. Si me respetan, yo respeto”, aseguró el jugador brasileño en los micrófonos de Movistar+ cuando fue preguntado por el asunto en cuestión.
Poco después, en zona mixta, explotó por los arbitrajes en LaLiga, siguiendo la línea de Joan Laporta y Hansi Flick: “Si hablo todo lo que pienso de los arbitrajes no vuelvo a jugar en La Liga”.
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