El delantero asume que no es normal tanta presión para chavales de 16 o 17 años: “La presión es enorme y pocos son capaces de afrontarla”, explicó en ‘TVP Sport’.
Robert Lewandowski concedió esta semana una entrevista al canal polaco de televisión, ‘TVP Sport’, en el que elogiaba las excelencias de La Masia, pero a la vez se hacía cruces por la forma en que se ponía el foco a los chavales más jóvenes. El delantero polaco realizaba una reflexión acertada sobre los problemas de cargar toda la responsabilidad a chavales de 16 a 17 años: “La gente que les rodea debe estar preparada para lo que pueda pasar si las cosas no van bien. La presión a la que se someten es enorme y pocas personas son capaces de asumirla. Veremos si estos jugadores que llegan son capaces de aguantar mentalmente diez, doce o más años”. Y es que Lewandowski veía la exposición de las redes sociales como el gran enemigo para esta nueva generación de futbolistas: “Todo es más difícil con Instagram y el resto de redes sociales. No puedes escaparte de él ni tampoco quedarte entre las cuatro paredes. Ahora mismo es el gran desafío del fútbol”.
Afortunadamente, el internacional asumía que no todo eran negros nubarrones en el horizonte, poniendo especial hincapié en la figura del joven Pau Cubarsí. El central es todo un ejemplo para Lewandowski de cómo formar un futbolista hasta la élite: “Hacía mucho tiempo que no veía un central con esta edad rompiendo las líneas con esa salida de balón y jugando con tanta tranquilidad. Y lo mejor de todo es que además es una gran persona”. El atacante también tenía palabras de elogio hacia Fermín López, “un chico que no para de progresar y trabajar”.
Por último, y hablando de su persona, el atacante polaco asumía que estos últimos años le han servido para asimilar algunas cosas en el mundo del fútbol que consideraba triviales o menos importantes: “Durante estos últimos cuatro o cinco años he cambiado y tengo una visión distinta sobre ciertos asuntos. El camino que tomas en la vida te va enseñando muchas cosas. Son cosas que no se aprenden en los libros”.
AS