El italiano Jannik Sinner consiguió lo que parecía una misión imposible: dejar al serbio Novak Djokovic fuera del Abierto Australia, torneo de Grand Slam que conquistó en diez ocasiones y donde llevaba una racha de 33 victorias consecutivas.
En cuatro sets quedó liquidado el partido ganado sorpresivamente, y también muy merecidamente, por Sinner 6-1, 6-2, 6-7 y 6-3. Su rival en la final será el ruso Daniil Medvédev, que superó al alemán Alexander Zverev, en la otra semifinal, 5-7, 3-6, 7-6, 7-6 y 6-3.
Djokovic, que mantuvo sus habituales discusiones con el umpire y con el público durante el partido, declaró: “Estaba en shock con mi nivel, no estaba haciendo muchas cosas como debía. Fue uno de los peores partidos en Grand Slam de mi carrera. Quiero darle crédito a Sinner porque hizo todo mejor que yo”.