Independiente superó a Vélez Sarsfield 1-0, en el estadio José Amalfitani, por la segunda fecha del Grupo A de la Copa de la Liga Profesional y lidera con 6 puntos, producto de sus dos victorias como visitante. Un cabezazo de Joaquín Laso, en el primer tiempo, y la firmeza para cerrarse atrás y defenderse en el segundo tiempo, le permitieron al equipo de Carlos Tevez festejar ante un deslucido Vélez.
Con mayor decisión por tocar, jugar y llegar empezó Vélez. Aunque no mostró volumen de juego, ni orden y criterio, presionó alto arriba y amenazó con un derechazo de Leonardo Jara que pegó en el poste.
Pero fue Independiente quien festejó. Nació de pelota parada, un tiro de esquina ejecutado por Santiago Toloza desde la punta izquierda, y en el área saltó Joaquín Laso y metió el certero frentazo directo al gol. El marcador central decidió no gritarlo por su pasado en El Fortín (desde inicios de 2018 hasta mediados de 2019).
Este gol le permitió crecer a Independiente, que tuvo una ráfaga de buen juego, impulsado por Santiago Tolosa, Iván Marcone y algunos chispazos de Lucas Saltita González. Vélez acusó el impacto y a su falta de identidad futbolística le sumó en este lapso final del primer tiempo una dosis de incertidumbre y desorden.
En el segundo tiempo quedó claramente definido el planteo de ambos equipos. El equipo de Gustavo Quinteros -que en ese breve tiempo de inicio de su trabajo no logró plasmar su idea de juego- con la pelota, superpoblando de jugadores desde el mediocampo hacia adelante pero sin ideas claras ni conceptos para elaborar peligro en serio. Tuvo su chance con un potente remate del ingresado Juan Ignacio Méndez que sacudió el travesaño. Antes hubo un penal -mano de Felipe Aguilar tras un cabezazo de Valentín Gómez- ignorado por el árbitro Hernán Mastrangelo y por el VAR…
Independiente juntó demasiada gente en su sector defensivo. Cerró espacios, no arriesgó, hizo culto del aguante y la cautela. Y su arquero, Rodrigo Rey, que había protagonizada una volada salvadora ante un tiro libre de Claudio Aquino poco antes de finalizar el primer tiempo, abusando, ante la permisividad y tolerancia de Mastrangelo, para hacer tiempo de manera deliberada.
Y en ese aguantar en el fondo, el Rojo dispuso de un contragolpe que finalizó con el disparo del ingresado Alex Luna que salió apenas desviado.
Así, un Independiente que no luce pero suma volvió a sumar de a tres y se afirma en la punta de su Grupo, mientras Vélez que no encuentra su rumbo e igual que la temporada pasada sufre por su ubicación en la tabla de promedios.