Ancelotti anima al alemán para que siga otro año más en activo. Dado su alto nivel de juego, el club también vería bien renovarle hasta 2025. Sus compañeros de vestuario alucinan con él.
Toni Kroos cumplirá el próximo 4 de enero 34 años. Una edad con la que el alemán siempre coqueteó con plantearse una retirada del fútbol en activo. Eternizar su carrera nunca estuvo en sus planes, pero sí seguir mientras estuviese a un alto nivel de juego, como es el caso actual.
Hace unos meses dio unas pistas fiables en el podcast que tiene con su hermano Félix, llamado Einfach mal luppen. “Siempre dije que para mí era clave terminar a un alto nivel y no arrastrarme durante tres años más. Me siento con las mismas ganas que hace 15 años de ganar estos partidos (eliminatorias europeas) y estos títulos (Champions, Liga…). No estoy cansado en absoluto. Me sigue poniendo de los nervios cuando perdemos partidos. Eso también es importante, que el sentimiento siga ahí. Y sigo disfrutando del fútbol, eso es lo que me gusta…”.
Su buena relación con la directiva del Real Madrid es clave en el próximo desenlace, como el verano pasado: “Me gustaría felicitar al club por la forma en que ha manejado todo este asunto. Todo estuvo a la altura de mi conexión con el club, por ambas partes. Siempre fui claro; no sabía si quería jugar otro año o no, pero si lo hacía no quería ir a otro equipo. No necesitamos grandes negociaciones ni regateos, no iba a meter a otro club de por medio a través del representante”.
Kroos inició el presente curso asumiendo que podía ser su última temporada en activo, sobre todo si su rol en el proyecto de Ancelotti empezase a ser residual. Cierto que arrancó suplente en San Mamés la Liga, pero ya en Almería fue titular, dando una asistencia a Bellingham. Y hasta hoy. Carletto le ha dejado claro al Arquitecto de Greifswald que para él es fundamental en sus esquemas tácticos. Según pudo saber AS, en varias ocasiones le ha dicho el italiano que aplace como mínimo un año más su retirada y que siga deleitando a la exigente afición del Bernabéu con su fútbol de orfebre. Sus compañeros le animan en la misma línea después de disfrutar con sus pases picassianos y su maravilloso control del juego tras los partidos o los entrenamientos en Valdebebas. La filosofía del cuerpo técnico y del vestuario con Kroos se resume en dos palabras: “¡Toni, quédate!”.
Sin prisas. Lo bueno de Kroos, como ya sucediese la temporada pasada, es que no tiene la menor desazón por decidir pronto su futuro. Su planteamiento es disfrutar cada día que pasa sin mirar las hojas del calendario. Quiere evaluar su rendimiento en cada partido y como el primer autocrítico es él, sabe que el día que no esté a la altura de las exigencias no hará falta que nadie le recuerde que su adiós se aproxima. Algo que está tan lejos que hasta el propio club, empezando por el Presidente y siguiendo por los propios aficionados, verían con muy buenos ojos que Kroos aceptase seguir de blanco un año más, hasta 2025, dentro de la política de renovaciones que el Real Madrid mantiene con todos sus futbolistas que pasan de los 30 años.
Los números avalan la futura continuidad de Toni, al estar a unos niveles superlativos. El germano ha jugado en 21 de los 23 encuentros oficiales que ha disputado su equipo, acumulando 5 asistencias y metiendo un gol, al Atleti del Cholo en el Metropolitano.
Kroos llegó en el verano de 2014 por solo 25 millones de euros, tras una audaz negociación del club al quitárselo al Bayern, que no pudo retenerle al quedarle solo un año de contrato. En estos casi 10 años, Kroos acumula ya 438 partidos con la camiseta blanca, con 28 goles y 96 asistencias (a sólo cuatro de las 100).
En su vitrina particular de su domicilio madrileño reposan las réplicas de 20 títulos con el Madrid: cuatro Champions (pertenece al prestigioso ‘Club de las 5′ al tener otra con el Bayern Múnich), cinco Mundiales de Clubes, cuatro Supercopas de Europa, tres Ligas, tres Supercopas de España y una Copa del Rey. No es suficiente para él. La posibilidad de igualar las 6 ‘Orejonas’ de Paco Gento la tiene presente, así como certificar su cuarta Liga, cuyo único obstáculo ahora mismo es el emergente Girona de Míchel.
El club tampoco tiene prisa, pero si sigue todo igual la sensación que hay en la entidad es que Toni Kroos continuará una temporada más en el nuevo Bernabéu. Un lujo.