El noruego, con cláusula para salir del City el próximo verano, presume de su amistad con Bellingham mientras su agente, Rafaela Pimenta, visitó el Santiago Bernabéu.
El Real Madrid se esfuerza en transmitir un mensaje unitario en lo relativo al mercado de fichajes: no hay operaciones en curso, ni conversaciones de ningún tipo. Todo eso queda para el próximo verano, para cuando la temporada haya terminado o, al menos, cuando esté en su recta final. El propio Ancelotti bromeaba con ello esta semana al ser preguntado por si el Madrid se plantea acudir al mercado invernal: “No creo que hagamos nada en enero, no haremos nada. En verano, ¡ojalá! En verano seguro que sí”. Hace días, el club blanco emitía una nota pública en la que aseguraba que no existía gestión alguna para tratar el fichaje de Mbappé de cara al próximo verano (en enero, a seis meses de acabar su contrato, ya podrá hablar con él sin cortapisas si así lo desea). Y sin embargo, hay ciertas figuras que revolotean por la atmósfera madridista pase lo que pase, ponga de su parte el club o no. Y uno de ellas es la de Erling Haaland.
El delantero del Manchester City siempre ha ocupado un papel secundario en los planes del Real Madrid, al menos en lo que a las últimas temporadas se refiere. Mbappé ha sido la prioridad, por él se ofrecieron 200 millones de euros en 2021 y se le esperaba en 2022, pese a que terminó renovando con el PSG. Ese mismo año Haaland pasó al City desde el Borussia Dortmund; consideró el Madrid entonces que era menos prioritario el fichaje de un ariete, pues Benzema acababa de hacer el mejor curso de su carrera (44 goles en 46 partidos). Se iba a un equipo puntero, con potencial económico prácticamente ilimitado y que compite cada curso por la Champions, que terminó ganando la pasada campaña. Y pese a todo, el nombre del noruego sigue saliendo en las quinielas para el futuro Madrid.
Sucede eso porque se dan las condiciones para ello: Haaland tiene una cláusula de rescisión que entra en juego el próximo verano y por la cual puede salir del City por una cantidad en el entorno de los 200 millones de euros (no ha trascendido cantidad oficial, hasta el momento). La agente del delantero, Rafaela Pimenta, heredera del imperio del fallecido Mino Raiola, ya dejó claro en una entrevista con AS que a sus clientes siempre les gusta tener opciones para el futuro, no ser rehenes unilaterales de los clubes como pasa en el PSG: “Yo estoy a favor de la libertad. Es mi batalla. Una de mis prioridades como agente es ofrecer al jugador aquello que yo llamo ‘la llave de la puerta’. Cuando el jugador va a un club yo hago todo para crear las condiciones para que la llave de la puerta esté en sus manos. ¿Y si mañana no soportas más estar ahí porque no te gusta, o no te pagan bien o porque tu mujer quiere vivir en París? Pues te vas, ¿no? No me gusta cuando mi jugador no es libre de decidir. El trabajador debe tener el derecho de ser traspasado, de decidir su propia vida”.
Al tratar el asunto de Haaland en particular, Pimenta prefirió irse a lo general… pero implícitamente, respondió: “Yo he hecho todos los contratos de esta agencia en los últimos 25 años. Todos. No hubo una sola vez que un jugador dijera “quiero irme” y que no pudiera hacerlo”. Rehusó afirmar o negar una cláusula concreta para el noruego y Guardiola dijo que no existía, pero la prensa inglesa ha dado cuenta de la misma y AS también informó en el pasado de su existencia. Y, casualidad o no, Pimenta estuvo el pasado miércoles en el Bernabéu para ver el Madrid-Braga, pese a que no había en el duelo ningún jugador representado por su agencia (sí tiene algunas futbolistas de la sección femenina en su cartera de clientes). Preguntada por ‘El Chiringuito’ por los motivos de su visita y si charlaría con Florentino sobre Haaland, lo negó mientras salía de plano: “No, no, no, no…”.
La relación entre Mino Raiola y el Real Madrid no fue la mejor.El carácter volcánico del italiano chocó con la actitud sosegada de Florentino Pérez, si bien los canales de comunicación seguían abiertos a través del director general, José Ángel Sánchez. Pimenta tiene un talante distinto y las relaciones están totalmente normalizadas. El padre del jugador, Alf-Inge Haaland, puso piedras en el camino durante la ida de semifinales de la pasada Champions, en la que se enfrentó verbalmente con varios aficionados del Madrid y terminó despidiéndose de ellos con varios cortes de mangas. Pero es una anécdota; si el fichaje de Haaland pasa a ser una opción, no habrá impedimentos de ese tipo.
Haaland-Bellingham: una amistad a la vista de todos
Falta por ver la predisposición del jugador, que se ha adaptado perfectamente al City, en lo personal y, sobre todo, en lo deportivo: la pasada campaña hizo 52 goles en 53 partidos y en la presente ya lleva 15 en 17. Ganó el triplete y el premio a Mejor Jugador de la UEFA, y sólo el Mundial de Messi le privó de ser Balón de Oro. El ambiente parece ideal para él, pero al mismo tiempo el noruego tiene una relación cercana con España: posee desde hace años una casa en Marbella (Málaga), donde pasa buena parte de su tiempo libre. Y en la plantilla del Real Madrid tiene un buen amigo: Jude Bellingham.
Haaland no se esfuerza en ocultar lo más mínimo el vínculo que le une con Bellingham, con el que compartió vestuario en el Borussia Dortmund. “He visto el increíble debut de Jude (Bellingham) en el Real Madrid, y me alegro mucho por él”, dijo en septiembre; “Qué tío”, comentó en una publicación del inglés después del triunfo in-extremis ante el Getafe, con gol suyo; y tras el doblete de Bellingham en el Clásico, subió una imagen del británico a punto de golpear el balón que acabaría en el 1-1, acompañada de: “Lo de este tío es irreal”.
AS