El entrenador portugués está firmando el peor inicio de temporada de toda su carrera en los banquillos. La Roma está antepenúltima y sólo ha sumado un punto. Inicio de mini-crisis.
Un punto de nueve posibles. Antepenúltimo. Regresa la liga italiana este fin de semana y duele ver a la Roma en esa difícil situación. Un mal inicio del conjunto giallorosso que sorprende ya que los grandes clubes de Italia como Inter, Juventus, Milan, Atalanta o Nápoles ya le han metido un buen puñado de puntos a la Roma.
El equipo de Mourinho ya está a rebufo de sus adversarios en la Serie A, solamente cuando se han disputado tres jornadas en la liga italiana. Curiosamente es el peor inicio de Mourinho de una temporada. Su Roma ha sido incapaz de ganar ninguno de los tres partidos, y excepto el Milan, tampoco ha tenido rivales de relumbrón. Empató con la Salernitana en el estreno de la Serie A (2-2), y luego ha endosado dos derrotas seguidas: 2-1, ante el Hellas Verona, y pinchazo también por 1-2 ante el Milan. Un desastroso inicio de temporada para la Roma de Mourinho. Mini-crisis en el conjunto romano.
Mourinho afronta su tercera temporada al frente de la Roma, aunque a punto estuvo de no seguir en el banquillo del Olímpico. No se digirió bien por el portugués la derrota en la final de la Europa League ante el Sevilla. A lo que hay que unir que ya tuvo sus más y sus menos con el estamento arbitral de la Serie A (ya fue sancionado por atacar al árbitro del Monza-Roma). Se rumoreó su salida este verano por la falta de inversión en la plantilla de los propietarios norteamericanos, pero finalmente sus posibles destinos se fueron cayendo: PSG, Portugal, Arabia Saudí… No fructificaron las ofertas y el portugués se mantuvo en la Roma. Quizá parte de culpa tenga esas distracciones, pero es el peor inicio de Mourinho como entrenador en cualquiera de sus equipos: Benfica, Leira, Oporto, Chelsea, Inter Milan, Real Madrid, Manchester United y Tottenham.
Este domingo, la Roma juega en casa ante el Empoli, que no ha conseguido sumar ningún punto todavía. Todo lo que no sea un triunfo giallorosso provocaría una crisis en toda regla en la Roma. Un Lukaku en racha, que se ha salido con Bélgica en este parón internacional, es la mejor baza que tiene Mourinho. El delantero, cedido por el Chelsea, es de los refuerzos que han llegado a última hora a la Roma. Paredes, Renato Sanchez, Aouar, Ndicka, Kristensen y Azmoun son los otros jugadores que han reforzado a una Roma que en temporadas pasadas ha destacado por la austeridad. El tiempo se acaba para un Mourinho que tiene contrato solamente hasta el próximo verano con la Roma.
AS