Los bianconeri batieron el Udinese a domicilio 3-0, con goles de Chiesa, Vlahovic (penalti) y Rabiot. Allegri alcanzó las 250 victorias como bianconero.
Massimiliano Allegri alcanzó las 250 victorias como técnico de la Juventus, algo que solo pudo conseguir una leyenda como Trapattoni, en un nuevo inicio para la Juventus. Tras un año muy complicado, terminado con sanciones, juicios y polémicas, la ‘nueva’ Vecchia Signora empezó de cero y lo hizo con una contundente victoria en el campo del Udinese, protagonizada por varios de sus hombres clave.
Los bianconeri salieron de inicio con un 3-5-2, utilizando a Federico Chiesa como segundo delantero, y acercar el italiano a la portería rival dio frutos enseguida. Tras apenas dos minutos, el campeón de Europa recibió el esférico en la frontal y abrió la lata fulminando a Silvestri con un disparo raso. Los turineses aumentaron su ventaja en el 20′, gracias a un penalti forzado por una mano de Ebosele y materializado por Vlahovic. Los fruilani protestaron por la pena máxima, pidieron otra poco después y asustaron a Szczesny con Thauvin. Justo antes del descanso, sin embargo, llegó la sentencia, con un centro de Cambiaso que encontró en el área a Rabiot, autor del 0-3 con un testarazo.
El Udinese disputó mucho mejor la segunda parte con la llegada de Samardzic, que tras ver frustrado su traspaso al Inter sigue en el mercado. Los friulani empezaron a crear peligro, cerrando el encuentro con 18 disparos y haciendo méritos para recortar distancias, pero el marcador no volvió a moverse.
La Juve comenzó bien una temporada que, sin competiciones europeas, la obligará a volver a pelear por el scudetto. Si los bianconeri son los de la primera parte, estarán entre los favoritos.
El Lecce remonta sobre la bocina al Lazio
El Lecce dio una de las sorpresas de la primera jornada de la Serie A al remontar al Lazio (2-1) con dos goles sobre la bocina que le sirvieron para llevarse tres puntos fundamentales que pueden marcar la diferencia al final del campeonato. El problema para los locales fue el de muchos equipos a lo largo de la temporada: la conexión entre Luis Alberto e Immobile. El centrocampista español encontró por enésima vez desde que juegan juntos al ariete dentro del área y el italiano no falló.
Aguantó el Lecce las ocasiones del Lazio y esperó pacientemente su momento, que llegó en los últimos compases. Sin nada que perder, el combinado que dirige D’Aversa se rebeló y encontró recompensa con el gol de Almqvist en el minuto 85 con el que amargó a un Lazio que, lejos de dar el empate por bueno, se fue a buscar la victoria. Sin embargo, lo que se encontró fue con otra buena jugada de los locales que finalizó Di Francesco solo dos minutos después del primer gol, en el 87, cazando un balón suelto tras un barullo en el área que acabó siendo definitivo.
AS