El brasileño puede perderse lo que resta de temporada por el manotazo a Hugo Duro. La sanción esperada es de tres partidos. El árbitro no refleja ningún gesto como aplausos ni los que hacía referencia a la afición che.
Vinicius, seguramente, ya no juegue lo que reste de Liga. El futbolista del Real Madrid fue expulsado por un manotazo a Hugo Duro en los minutos finales del partido contra el Valencia. Una acción que vino como consecuencia para zafarse de un agarrón del cuello del rival. La sanción rondará los tres partidos, la misma cantidad de jornadas que restan en Primera División. No hay indicios de que la sanción sea mayor ya que el árbitro no refleja ningún gesto como aplausos ni los que hacía referencia a la afición che de un posible descenso a Segunda.
Según reflejó de Burgos Bengoetxea en el acta del Valencia-Real Madrid el motivo de la expulsión de Vinicius fue por “golpear con su brazo en el rostro de un adversario cuando el balón no estaba en juego, en una confrontación masiva de jugadores de ambos equipos. El jugador contrario no tuvo que ser atendido”. Un incidente que el Comité de Competición estudiará para aplicar una sanción mayor al de un solo partido.
En la descripción del árbitro hay un matiz que puede hacer que la sanción sea menor de lo esperado para el brasileño. Ya que el colegiado vasco solo habla de “golpear” y no de “agresión”. Dos palabras que tienen sanciones muy diferentes. Cuando un árbitro suele hacer referencia al primer término, se suele aplicar el artículo 130.2 del Código Disciplinario. Este describe una acción violenta en la que no se produzcan consecuencias dañosas o lesivas para el rival y se “produjera al margen del juego, no estando en posibilidad de disputar el balón o el juego detenido, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos”.
Si De Burgos Bengoetxea hubiera descrito dicha acción como agresión, se presupondría una sanción mucho mayor. Según recoge el artículo 103 de la misma norma, “agredir a otro/a, sin causar lesión, ponderándose como factor determinante del elemento doloso, necesario en esta infracción, la circunstancia de que la acción tenga lugar estando el juego detenido o a distancia tal de donde el mismo se desarrolla que resulte imposible intervenir en un lance de aquél, se sancionará con suspensión de cuatro a doce partidos”.
Todo hace pensar que la sanción para Vinicius será la de tres partidos. La misma que tuvo hace unos meses Isaac Carcelén, tras golpear un rival en la tangana final del Cádiz-Getafe. Aunque, antes, Competición analizará las imágenes y atenderá las alegaciones del conjunto blanco para intentar la sanción más leve.
as