Qatar Sports Investments, propietario del PSG, planea expandirse por el resto del mundo para establecer un modelo parecido al del City Football Group
Convertido en un trasatlántico del fútbol francés, a punto de erigirse como el primer equipo que gana once títulos de la Ligue 1, el PSG, gobernado por Qatar, ha iniciado la expansión de Qatar Sports Investments, el fondo de inversión soberano del club, para imitar el modelo que el City Football Group ha establecido en el fútbol mundial. El objetivo es establecer una red de equipos satélite para fomentar el desarrollo de jóvenes y para potenciar a la matriz, el PSG, en su búsqueda de la Champions League.
En 2022, QSI ya formalizó la adquisición del 30 % de las acciones del Sporting de Braga. El conjunto portugués fue el segundo equipo en el que invierte el fondo de inversión qatarí después del PSG, por el que pagó 50 millones de euros en 2011 y al que ha convertido en el mejor equipo de Francia, que no de Europa. La multipropiedad ha permitido que distintos jugadores jóvenes de la cantera se marchen cedidos a Portugal, además de fomentar el intercambio de jugadores a corto plazo.
El Sporting de Braga es el primero de los muchos clubes que ha monitorizado Qatar. El Málaga es el segundo, aunque la inversión se anticipa más complicada debido al proceso judicial en el que se encuentra inmerso el conjunto de la Costa del Sol. Al-Thani, su propietario, es escéptico respecto a una posible venta, por lo que a pesar de que haya interés, confirmado por Al Khelaïfi, las negociaciones no fructificarán, ni mucho menos, en apenas semanas.
Qatar, entretanto, sigue buscando equipos satélite con los que pueda aumentar los beneficios y con los que pueda nutrir de talentos al PSG. El caso paradigmático de la multipropiedad es el Manchester City, que cuenta con nueve entidades adheridas al grupo City Football Group, presidido por Ferrán Soriano, y cuyo modelo ha experimentado un crecimiento sin precedentes durante los últimos años.
En Brasil, Europa y Sudamérica ya se han divisado distintas inversiones para intentar aumentar el alcance de Qatar Sports Investments. La inversión, en todo caso, no tendría ninguna consecuencia respecto al PSG, con el que sigue comprometido, ni al Manchester United, con el que se encuentran en plena fase de adquisición y cuya inversión no afectaría, en absoluto, a la realizada en el conjunto capitalino. Qatar sigue intentando, a ojos del mundo, transformarse en una gran potencia en la industria del fútbol.