Racing Club superó a Tigre 3-2, en tiempo de alargue, y jugará la final del Trofeo de Campeones ante Boca Juniors, el domingo, a las 17 horas, en el estadio La Pedrera de San Luis. Tigre ganaba 2-0 al finalizar el primer tiempo, Racing lo igualó en el segundo; y en el suplementario Gabriel Hauche le dio el triunfo a La Academia.
En el estadio Tomás A. Ducó, un muy buen primer tiempo de Tigre le permitió pegar dos gritos: a los 28 minutos con un penal convertido por Mateo Retegui -a él mismo le cometieron la infracción dentro del área- y con un toque mordido de Facundo Colidio, a los 37 minutos, tras una buen acción y centro de Retegui.
En medio de los dos goles de Tigre hubo espacio para la polémica. Un injusta doble amarilla, mostrada por Darío Herrera -quien volvió a cumplir una mala actuación, como tantas veces en esta temporada- a Abel Luciatti dejó al equipo de Diego Martínez con un jugador menos. En esa primera etapa, donde era notoria la influencia de Ezequeiel Equi Fernández y Facundo Colidio, Tigre era mucho más que un inexpresivo y lento Racing. Y el hombre de menos no se notó. En el segundo tiempo sí se notaría, y mucho.
Además, el equipo de Fernando Gago debió reemplazar a Enzo Copetti, debido a una seria lesión en su rodilla izquierda producida en otra de las jugadas polémicas del partido, cuando fue trabado por Víctor Cabrera dentro del área. El delantero le dejó su lugar a Maximiliano Romero, a los 42 minutos.
Todo cambió en el segundo tiempo, con un Racing avasallante y demoledor. La actitud fue diametralmente opuesta a la de los anteriores 45 minutos. En los primeros instantes estuvo cerca con los peligrosos intentos de Jonathan Gómez y Maximiliano Romero, salvados por el arquero Gonzalo Marinelli.
Ante ese abrumador dominio de Racing, Tigre no encontró respuesta. Desbordado y arrinconado contra su área, lejísimos estuvo de la buena imagen que proyectó en el primer tiempo. Por eso no sorprendió que La Academia convirtiese.
Un zurdazo demoledor de Maximiliano Romero, asistido por Jonathan Gómez tras una gran maniobra, acortó la diferencia, a los 13minutos.
Se visualizaba la igualdad. Y llegó, a los 38 minutos, con una definición de Jonathan Gómez -una de las grandes figuras de la tarde- libre frente al arco y luego de una notable asistencia de Maximiliano Romero.
Lo pudo liquidar un entusiasmado Racing ante un abatido, física, mental y futbolísticamente, Tigre. Pero debió aguardar hasta el alargue.
En esos dos mini tiempos de 15 minutos cada uno, necesarios para definir al ganador, Racing mantuvo su envión. Y tuvo su gran festejo, a tres minutos del final, con un centro de Jonathan Carbonero y el frentazo preciso de Gabriel Hauche.
De esta manera, Racing (subcampeón del Campeonato de Liga) dejó afuera a Tigre (subcampeón de la Copa de la Liga) en un partido cambiante y emotivo y ahora buscará revancha el domingo ante Boca (campeón de Campeonato y Copa), tras la aún fresca frustración en la última fecha del campeonato.