El futbolista de Bondy ha puesto en duda su continuidad si Neymar sigue jugando en la capital parisina, según El País. No le gustan los actos de indisciplina del brasileño.
La relación entre Mbappé, Neymar y el PSG se complica por momentos. El delantero francés ha condicionado su continuidad en la entidad parisina hasta 2025 a la salida del atacante brasileño, según El País. Mbappé habría insinuado que los actos de indisciplina de Ney afectan negativamente al club. En la información publicada por Diego Torres, se indica que la renovación de Neymar hasta 2027 fue una decepción tanto para el talento de Bondy como para su entorno y que el exjugador del Barça está plenamente convencido de que su compañero en el tridente que forma junto a Messi quiere que lo despidan. Un motivo de suficiente peso como para que se sucedan las informaciones que aseguran que el francés no está contento y busca una salida en las próximas ventanas de fichajes. El propio Mbappé salió al paso de los rumores tras la victoria ante el Olympique de Marsella en el Clásico de Francia: “Es falso que haya pedido salir en enero”.
Los polémica por los lanzamientos de penaltis que solucionó Galtier a favor del francés y el mayor protagonismo en actos publicitarios no favorecen al día a día en el vestuario. Al igual que apunta el citado medio que Messi considera que Mbappé no está al nivel futbolístico de su fama ni de su salario, 40 millones por temporada. La situación llegó a un punto en el que parecía que lo mejor para el PSG era que Neymar saliera del club el pasado verano y eso intentó, siempre según la información de Diego Torres, el presidente del club, Nasser Al Khleäifi. Con una cláusula de 400 millones de euros, sólo el Newcastle aparecía en el horizonte como club para acometer su incorporación. Además existió la vía de la cesión con el Chelsea.
Los ‘blues’ pagaban 10 millones de euros por un año de cesión del jugador, una opción que se cayó porque los franceses tendrían que hacerse cargo de tres cuartas partes de su salario, un hecho complicado ya que la legislación en Francia impide tributar una parte importante de los ingresos a un club extranjero. A esto hay que sumar que Ney llegó a la pretemporada con siete kilos por encima de su peso, según cita El País de fuentes del club británico, pero que a base de trabajo ha dado la vuelta a su forma y ya suma 16 goles y 12 asistencias por los 12 tantos y un pase de gol de Mbappé y los siete goles y ocho asistencias de Messi. De mantener el estado de forma actual, Neymar sí que sería un jugador interesante para el Chelsea que aprobaría el pago de 40 millones de euros por su cesión de una temporada. En verano, el PSG estaba dispuesto a pagar tres cuartas partes de su salario, pero la legislación en Francia impide tributar una parte importante de los ingresos a un club extranjero.
Una hipotética salida que alegraría al presidente del PSG para que el de Bondy estuviera contento en París sin Neymar. Su marcha, en caso de ser en forma de finiquito, será la más alta de la historia del deporte con una cifra cercana a los 300 millones de euros. La publicación de El País añade las declaraciones de un empleado del club: “Aquí llevan meses estudiando cómo pagarle a Neymar el finiquito más elevado de la historia del deporte, cerca de 300 millones de euros”.
Las espadas están en todo lo alto en París y parece que entre Neymar y Mbappé sólo puede quedar uno para liderar al PSG en el asalto de la tan ansiada Champions.