Vélez goleó a Estudiantes 4-0, en el estadio José Amalfitani, y se quedó con el segundo puesto y el pasaje a los octavos de final, en el Grupo C, de la Copa Libertadores. Lucas Janson, por duplicado, y Lucas Pratto y el juvenil Abiel Osorio, en el segundo tiempo, reflejaron en el resultado la amplia superioridad de El Fortín ante los suplentes del Pincha.
Además, el triunfo de Nacional ante Bragantino 3-0 en Montevideo le permitió a Vélez redondear su noche feliz. No hace mucho, la clasificación asomaba como una utopía, pero las dos victorias, tras dos derrotas y dos empates en las cuatro primeras fechas, y una serie de resultados hicieron posible el pase del equipo de Liniers.
Lo presentía su gente, que llenó el estadio y desde las horas previas, venía desparramando su ilusión y su confianza. Y el equipo respondió, y hasta superó las expectativas: controló con autoridad, buen juego y mucha convicción los noventa minutos.
Aunque de entrada pasó un par de sobresaltos -un remate apenas desviado de Jorge Morel y una enorme tapada de Lucas Hoyos ante el cercano tiro de Carlo Lattanzio-, Vélez siempre dispuso del control y tuvo constantes y peligrosas llegadas.
Un Lucas Janson a pleno destapó la goleada, con dos definiciones de derecha cargadas de sutileza. A los 21 minutos definió ante Jerónimo Portau, tras recibir un pase largo, cruzado y perfecto de Máximo Perrone. Y a los 41, tras un envío más largo aún de Lucas Hoyos para acomodarse y volver a superar al arquero visitante.
No se apaciguó el equipo dirigido por Julio Vaccari con la diferencia, y las noticias felices llegadas desde Montevideo. Fue por más. Ambicioso, decidido, hasta con exquisiteces y lujos. Lo apabulló al Estudiantes alternativo y además de la gran fiesta celebró dos goles más.
Un golazo del siempre vigente, solidario y destacado Lucas Pratto, a los 27 minutos, que nació con una guapeza y esfuerzo del Oso para recuperar en mitad de cancha, avanzar, tirar una pared con un compañero y llegando al fondo y con poco ángulo meter un fantástico derechazo al segundo palo.
El pibe Abiel Osario, ingresado diez minutos antes, sacó ventaja de una falla defensiva de Estudiantes y definió ante Portau, a los 41 minutos.
En medio de estos dos goles fortineros, Estudiantes se quedó con un hombre menos porque Bruno Váldez recibió la segunda amonestación, a los 30 minutos.
Otro dato feliz para Vélez fue la presentación de otra joya de sus inferiores: Gianluca Prestianni, de apenas 16 años y el futbolista más joven en debutar en la historia del club. En los dieciocho minutos que estuvo en cancha demostró su talento y enorme futuro.