Vélez Sarsfield y Boca Juniors igualaron 0-0, en el estadio José Amalfitani, por la novena fecha de la Copa de la Liga. El partido, con mejor arranque de El Fortín y levantada del visitante al final, mostró bajo vuelo futbolístico.
Y dejó espacio para la polémica: ¿tiene sentido el VAR? En el segundo tiempo hubo dos penales -uno para cada lado-, que fueron ignorados por el encargado del sistema tecnológico, Mauro Vigliano, y el árbitro Patricio Loustau.
Un infracción de Lautaro Giannetti a Sebastián Villa, en uno de los tantos desbordes del segundo tiempo, ni siquiera fue analizada, a los 14 minutos. Y hubo una acción más clara: un manotazo de Alan Varela, tras un cabezazo de Maximiliano Perrone, a los 37 minutos.
Un Vélez excedido de actitud, presionando y buscando el partido controló los primeros quince minutos. Pero no tuvo profundidad. Se a poco se fue acomodando Boca, aunque repitiendo imprecisiones y también careciendo de peso en el área rival. Así pasó un primer período carente de emociones, salvo el cabezazo de Sebastián Sosa Sánchez que salió muy cerca cuando se jugaba tiempo de descuento.
En el segundo tiempo, Vélez se notó cansado -había jugado el jueves a la noche ante Estudiantes, por la Libertadores- y Boca tuvo mayor claridad con el ingreso de Óscar Romero. También creció con el ingreso de Juan Ramírez, a los 20.
Y Villa estuvo imparable para Jara. De los veloces desbordes del colombiano nacieron un centro para el cabezazo desviado de Luis Vázquez y otro para la entrada de Juan Ramírez tapado por Hoyos.
El arquero local también tuvo una buena atajada ante un disparo de Luis Advincula. Y Vélez tuvo su chance clara con un tiro de libre de Luca Orellano cabeceado por Nicolás Garayalde que chocó con una notable salvada de Agustión Rossi.
Más allá de estas llegadas en la segunda etapa, el partido redondeó un nivel flojo. Para destacar la actuación del juvenil central de Vélez, Valentín Gómez (18 años), mostrando personalidad, eficiencia y firmeza.
Con el punto Boca se afirma en sus pretensiones de clasificar entre los cuatro equipos del Grupo B que lucharán por el título. En cambio, Vélez -cuyos hinchas insultaron a la Comisión Directiva y al presidente Sergio Rapisarda por el mal presente de la institución-, va perdiendo las últimas esperanzas.