Carlos María García Cambón, uno de los tantos futbolistas talentosos de las década del 60 y 70, falleció ayer, a los 73 años. El ídolo de Chacarita Juniors y Boca Juniors venía sufriendo problemas de salud en los últimos tiempos y había sido sometido a cuatro operaciones por un aneurisma aórtico abdominal.
Entre los hitos más importantes de su carrera figuran su participación en el Chacarita Juniors campeón del Metropolitano de 1969 -el único título del Funebrero en la categoría máxima-, aunque no era titular aportó su calidad y sus goles en esa campaña. Chacarita fue su club de origen y allí jugó hasta fines de 1973 cuando lo compró Boca Juniors.
El estreno de García Cambón con la camiseta de Boca fue excelente: le metió cuatro goles a River Plate, el 3 de febrero de 1974 en la primera fecha del campeonato, en el triunfo 5-2. Un registro histórico.
En el Xeneixe, García Cambón dio dos vueltas olímpicas: Metropolitano y Nacional de 1976, en la etapa de Juan Carlos Toto Lorenzo como entrenador.
Luego jugó en Unión de Santa Fe, en Rochester Lancers y Las Vegas Eagles de Estados Unidos y se retiró en el Loma Negra cargado de figuras de 1981. Como director técnico tuvo un paso interino en Boca Juniors en 1981 y dirigió clubes en el exterior (Bolivia e Indonesia).