Desde hoy el aeropuerto internacional de Ezeiza luce una estatua de Diego Maradona, sumando a la innumerable cantidad de homenajes al ex futbolista fallecido hace poco más de un año.
Ubicada en el hall central, sitio obligado de paso de pasajeros y visitantes del aeropuerto, la escultura fue elaborada bajo la técnica de impresión 3D a partir de tereftalato de polietileno (PET).
La idea de que Maradona tuviera una estatua en el principal aeropuerto del país se remonta a la historia de la larga amistad entre el futbolista y Eduardo Eurnekian, fundador de Aeropuertos Argentinos 2000. En una ocasión, el empresario le planteó la idea de realizar una estatua y Maradona le comentó que le gustaría que estuviera emplazada en el aeropuerto de Ezeiza, donde quienes parten y llegan pudieran verla.
El proceso de fabricación comenzó con la selección de imágenes de Maradona en el Mundial México 86: en el momento del himno nacional y concentrado en lo que se vendría, la final del mundo. La producción total llevó diez días y se realizó de la siguiente manera:
El diseño fue efectuado por artistas digitales en software 3D, superponiendo diferentes imágenes para lograr los detalles y expresiones que identifican a Diego. Con el archivo 3D realizado, se segmentaron en diversas piezas, de manera digital, para luego unirlas como un rompecabezas una vez fabricadas con impresión 3D. Se utilizaron 40 equipos imprimiendo en simultáneo para la fabricación.
Posteriormente a la unión de las piezas, se efectuaron, a mano, los detalles artísticos para darle el carácter de Diego Armando Maradona como todos lo conocemos. Por último, la figura fue coloreada con pintura automotriz, consiguiendo la textura característica de un monumento metálico. El resultado es una escultura que mezcla pasión, arte y la última tecnología en fabricación digital para inmortalizar al astro.