Una tarde soñada tuvo Gonzalo Montiel en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán. En su primer partido como titular en Sevilla, el marcador de punta derecho del seleccionado argentino recuperó la pelota en una acción que culminó con la apertura del marcador por parte de Alejandro Papu Gómez y luego convirtió el segundo gol, con blooper incluido, para el conjunto andaluz, que le ganó por 3-1 a Valencia.
Iban solo dos minutos de juego cuando Erik Lamela, después de una cesión del ex defensor de River, metió un pase filtrado perfecto para Gómez. Sevilla comenzó a bailar al ritmo del Papu porque el argentino dejó correr el balón y, sin controlarlo, metió un derechazo perfecto al primer palo para decretar el 1-0.
A los 14 llegó la insólita conversión de Montiel. El futbolista bonaerense escaló por la banda derecha e intentó sacar un centro, que se desvió en un rival. La pelota agarró tal efecto que, cuando picó dentro del área, descolocó al arquero gerogiano Giorgi Mamardashvili y se metió dentro del arco.
“Me voy contento por el triunfo y por el debut, hay que seguir trabajando. Lo importante es que sumamos de tres y bienvenido sea si me suman el gol, me entreno para seguir creciendo y desde donde me toque aportar lo mío. Me adapté muy rápido y disfruto de estar al lado de los argentinos”, manifestó Montiel.
Rafa Mir extendió a los 22 la ventaja para Sevilla, que tuvo a Acuña en el banco de suplentes. Hugo Duro, a los 31, descontó para Valencia en Nervión.