Gastón Gómez fue el valor más alto de un Racing Club que no brilló, pero pasó a Boca Juniors en los penales y accedió a la final de la Copa de la Liga.
Titular por la partida de Gabriel Arias al seleccionado chileno, atajó un penal en la definición desde los doce pasos y celebró la “responsabilidad linda” que debió asumir.
“Atajar en un club grande como Racing es una responsabilidad”, destacó en declaraciones a TNT Sports.
Consultado sobre si analizó a los ejecutantes del xeneize en la previa, reconoció que los estudió “un poco”.
“Después, cada uno abajo de los tres palos toma la decisión. A veces nos dejamos llevar por la intuición”, aclaró.
En la final, el rival podría ser nada más y nada menos que Independiente, pero Gómez no piensa en eso: “Estamos para jugar la final, contra el que sea, no me importa quién”.