“El primer objetivo claro de los Juegos Olímpicos es aspirar a un diploma olímpico. Hay 12 equipos y todos van a ser difíciles, pero entrenando y dejando todo en estos meses lo podemos lograr. Después del partido contra Qatar, lo primero que se dijo en el vestuario fue: “Muchachos, nos quedan seis meses. Cada uno sabe lo que tiene que hacer. Pongámonos las pilas y lleguemos a Tokio al 100%”. Creo que todos sabemos que podemos hacer más cosas. Sería un lindo cierre de ciclo olímpico conseguir algo grande”, sentenció Lucas Moscariello, integrante de la Selección Argentina de handball. cumplir, después veremos.
En el reciente Mundial de Egipto, donde Los Gladiadores lograron su mejor actuación histórica, Moscariello fue el segundo máximo anotador albiceleste: convirtió 21 tantos sobre 24 lanzamientos y fue el más efectivo del equipo (88%) y también el atleta de campo con más tiempo de juego: 4 horas y 13 minutos en seis partidos.
“Creo que fue mi mejor torneo con la Selección. El hecho de estar en todos los torneos que hicimos con Manolo Cadenas y de compartir con los mismos jugadores, te da un plus sobre todo en el sistema que el entrenador quiere que conozcas y que tengas automatizado. Eso hace que sepamos lo que va a hacer el compañero en ataque y en defensa y te ayuda muchísimo. Aparte, me vengo preparando desde hace mucho tiempo en lo físico, lo táctico y también en lo mental y ahora en ese aspecto estoy muy bien y es una de las cosas que más me ayudaron en este Mundial”, sentenció.
Moscariello se subió al top 20 de los máximos goleadores de la Selección masculina, al llegar a los 144 goles en 68 encuentros oficiales desde su debut en 2016. Tras este Mundial, emigró del Liberbank Cuenca español al Montpellier francés, campeón de la Champions League 2017-18.
“Hace tiempo que venimos haciendo las cosas bien y luchando con equipos que tienen jugadores y sistemas de juego increíbles, equipos que están por ejemplo entre los 10 mejores del mundo. Hace rato que nos ganamos su respeto y hay que seguir haciéndolo”, afirmó en una entrevista con el Departamento de Comunicaciones de la Confederación Argentina de Handball.
Agregó: “Lo pudimos demostrar en este Mundial. Los equipos europeos no entran a jugar contra Argentina relajados o sabiendo que van a ganar: saben que va a ser un partido duro. Estamos muy convencidos de todo lo que venimos haciendo y eso nos da mucha confianza. Estamos compitiendo en todos los partidos y esa es la clave de la mística de esta Selección”, agregó.
Sobre el nivel alcanzado por Los Gladiadores, Moscariello considera que “es parte del ADN argentino. También pasa en otros deportes. Por algo cada selección e ganó su apodo: Los Pumas, Las Leonas, La Garra… Te vaya bien o te vaya mal, siempre el argentino destaca por su forma de dejarlo todo. Dentro del grupo, viendo o conociendo la historia de cada jugador y sabiendo lo que dejan o resignan por irse a jugar a Europa, me doy cuenta de que hay algo especial. Claramente este no es un deporte como el fútbol o como el básquet en donde se pagan cantidades increíbles de dinero. Cada uno de los que estuvieron en este largo proceso se merece el nombre de Gladiadores”.
“Hay un crecimiento que se viene dando desde antes de que llegara Manolo Cadenas. Muchos de nosotros vinimos a jugar a Europa para poder seguir mejorando y que eso nos permitiera jugar en la Selección y, en consecuencia, influir positivamente. Manolo influyó mucho porque está en todos los detalles y en todos los entrenamientos te exige al 100%. A mí me dio y me da muchas herramientas para saber cómo atacar al rival y para entender para dónde va cada uno. Son herramientas que te sirven muchísimo. Y a los más jóvenes les exige mucho porque sabe que pueden mejorar y dar todavía más”.