Lucas Hoyos, capitán, y Ricardo Ricky Álvarez, uno de los más experimentados del plantel, dieron la cara tras la goleada sufrida ante Boca. Ambos futbolistas se sentaron en la sala de prensa de la Villa Olímpica y dieron sus puntos de vista sobre lo ocurrido el domingo pasado en la derrota más abultada de Vélez en el José Amalfitani.
“Hicimos mucha autocrítica, lo principal se habló en grupo. La realidad es que hay que dar vuelta la página, hacernos fuerte como grupo y como equipo y demostrarlo el sábado en la cancha, con Talleres en Córdoba. Hay que cambiar el chip y pensar en lo que viene”, señaló Lucas Hoyos.
“Lo que pasó en el vestuario, queda en el vestuario. Se dijo todo lo que se tenía que decir. Somos responsables, eso está claro. Nos faltamos el respeto a nosotros mismos como profesionales”, agregó el arquero.
Reconoció que “este cachetazo nos bajó a la tierra. No eramos los mejores, ni tampoco somos los peores”.
Por su parte, Álvarez manifestó que “si tuviese que ponerme a analizar el partido con Boca no sabría por donde empezar. No competimos como veníamos haciéndolo en los partidos anteriores. Creo que no resiste mayor análisis. Fue muy malo de parte nuestra. Nos dolió mucho el resultado como a todo el mundo Vélez y lo que pasó no nos representa”-
“Ahora lo importante es ponerle la cara al golpe que sufrimos y no dudar del trabajo que se viene haciendo. Esa es la forma de salir adelante”, añadió el volante.
Reconoció que “fueron días difíciles para nosotros. Pero tenemos que dejar esto como un hecho aislado, y que se vuelva a ver el Vélez de los últimos partidos, el Vélez de Mauricio, que es el que nos representa”.