Israel Damonte se despidió hoy como entrenador de Huracán y lo hizo con tristeza, a pesar del triunfo en Paraná, porque admitió que le hubiese gustado continuar en el cargo.
“El equipo venía jugando menor y contento por los jugadores porque hay muchos chicos del club. Me voy dolido porque me hubiese gustado seguir”, dijo el técnico por la señal de TNT Sports.
Y agregó: “Lo que me queda es el afecto de los jugadores, lo importante en el fútbol son las relaciones”.