Con un gran tiro libre y una vaselina, una de las tantas que Luis Miguel Rodríguez acostumbra regalar en cualquier cancha del fútbol argentino, Colón le ganó a Estudiantes. En ambos casos, el apodado Pulga ensayó un festejo con las manos apuntando al cielo y las preguntas sobre quién era el destinatario de esa dedicatoria no tardaron en aparecer.
En las redes sociales se encontró la respuesta. Una usuaria de nombre Camila (@CamiBertotti) explicó la situación. Su abuelo, fanático de Colón y del Pulga, falleció hace poco tiempo, y por eso pidió al delantero un gesto, si convertía un gol en La Plata.
“El jueves estábamos comiendo con mi señora, mis hijos y mi hermano, y estaba dando un show el ‘Ruso’. Y ahí nos contó la historia del tío. Después me escribió que estaban pasando un momento malo y le contesté que lo sentía mucho y que si hacía un gol lo iba a dedicar mirando al cielo. En medio del festejo me acordé”, comentó Rodríguez.
En TyC Sports, Pulga añadió: “Se dio justo que el jueves el pibe me contó a historia. No suelo contestar todos los mensajes porque son muchos y a veces uno no quiere quedar mal con nadie”.
“Ojalá que a la familia le haya venido bien este festejo, a pesar de todo lo que significa perder un ser querido. Es duro no tener a un familiar”, subrayó el futbolista nacido en Simoca, Tucumán
Por su parte, Camila comentó: “Sos de otro planeta Pulga. Te voy a estar agradecida de por vida. No hay consuelo para tanto dolor pero estas cosas nos llenan el alma”.