Especial por Darío Procopio
Esta mañana, en el elegante Palace Brongniart de París, se conocieron los grupos del próximo Mundial de Rugby de Francia 2023. Fiel a su tradición, World Rugby sorteó los grupos de la cita mayor aún sin conocer la totalidad de los 20 clasificados.
El sorteo determinó que Los Pumas integrarán el Grupo D junto con el subcampeón Inglaterra, Japón, Oceanía 1 (Tonga o Samoa) y Américas 2 (EEUU, Canadá o Uruguay).
A priori, el sorteo fue favorable a Argentina, sobre todo por lo que el azar dictaminó desde el bombo 2 al salir la bolilla de Japón. Sin desmerecer el crecimiento del rugby nipón, Irlanda (un clásico mundialista de los Pumas), Francia (local y deja vu del RWC 2007) y Australia aparecían como rivales más complicados por historia y presente.
De cualquier manera faltan casi 3 años para la cita mundialista y cualquier análisis se vuelve falible por lo prematuro. Por estas horas, lo mejor es repasar el historial de los argentinos y sus rivales. Desde esa óptica histórica, Argentina tiene chances de meterse entre los 8 mejores.
Contra Inglaterra se jugó en 24 oportunidades y los europeos se impusieron en 19 de ellas. En el marco mundialista, los 3 cruces resultaron favorables a los británicos. El más reciente marcó la eliminación de Los Pumas de Japón 2019 al caer sin atenuantes por 39 a 10. Antes de eso, se perdió por ajustados marcadores de 13 a 9 (RWC 2011) y 24 a 18 (RWC 1995). Incluso, en aquél partido de 1995, Argentina marcó dos tries (Noriega y Arbizu) contra ninguno de su rival que sólo salvó el partido con la puntería de Rob Andrew.
En lo que respecta al enfrentamiento con Japón, se registra un solo antecedente en un mundial con triunfo para Argentina por 33 a 12, en Cardiff, en el marco de la RWC 1999. El historia general es de 5 triunfos albicelestes en un total de 6 enfrentamientos. De todas formas en los últimos dos mundiales, Japón derrotó nada menos que a Sudáfrica, Irlanda y Escocia. Argentina no deberá subestimar a los orientales.
Por el lado de ¨Americas 2¨ se espera a alguno de los viejos conocidos continentales. Con Canadá y Uruguay no hay partidos mundialistas en común. Con Estados Unidos, el único antecedente es la victoria Argentina por 47 a 17, en la última fecha del grupo de Japón 2019. El historial general favorece ampliamente a Los Pumas ante cualquiera de los 3 posibles rivales americanos.
¨Oceanía 1¨ completa el grupo y los rivales pueden ser Tonga o Samoa. Con ambos hay historias mundialistas. Con los tonganos hubo encuentros en las RWCs 2015 y 2019 con dos victorias argentinas por 45 a 16 y 28 a 12, respectivamente. Con Samoa, el destino nos enfrentó en 3 mundiales consecutivos. Los samoanos se impusieron 35 a 12 en RWC 1991 y 32 a 26 en RWC 1995. Los Pumas se tomaron revancha en RWC 1999 cuando dieron vuelta un mal primer tiempo y derrotaron a los oceánicos por 32 a 16 con un memorable try de Alejandro Allub y un Gonzalo Quesada inmejorable con su puntería a los postes.
En una decisión polémica que sólo se explica en los espurios intereses políticos del establishment europeo que maneja los hilos del rugby mundial, se decidió no postergar el sorteo. Así, los bombos del sorteo se conformaron acorde al ranking de enero 2020.
Para entender lo ilógico del sorteo de hoy, se debe tener en cuenta que el ranking de enero 2020 no sufrió modificaciones posteriores al Mundial de Japón que terminó en octubre 2019.
Además la pandemia de COVID afectó las competencias de 2020 que no fueron tenidas en cuenta. En definitiva World Rugby sorteó el Mundial 2023 con el ranking del Mundial 2019.
El sorteo debió postergarse al menos un año para utilizar rankings de competencias entre mundiales, pero pareciera que las autoridades de World Rugby, encabezadas por el inglés Bill Beaumont y el francés Bernard Laporte (rivales electorales de Agustin Pichot) no tomaron nota de la Pandemia de COVID que afecta al planeta sin precedentes.
Así las cosas, el Bombo 1 quedó conformado por Sudáfrica, Nueva Zelanda, Inglaterra y Gales. El Bombo 2 tuvo en su interior a Irlanda, Australia, Francia (local) y Japón. Los Pumas fueron al bombo 3 con Escocia, Italia y Fiji.
El equipo de Mario Ledesma hoy ocupa el 8vo lugar en el ranking tras su buena participación en el Tres Naciones, sin embargo entró al sorteo en el bombo 3 en el 11vo lugar y de esa manera a priori corría riego de enfrentar a rivales más fuertes. Finalmente fue el azar el que otorgó a Argentina la justicia que le negó World Rugby y así, Los Pumas que merecían por ranking estar en el Bombo 2 se encontraron en suerte con Japón que hoy debería estar en el Bombo 3.
Sin embargo, a la hora de la verdad no importan tanto los rivales sino como llegue el equipo. Quedó demostrado en el último Tres Naciones que estos Pumas se le animan a cualquiera. Hoy, aunque jamás lo admitan, los posibles rivales de los Bombos 1 y 2 preferían a cualquier otro rival del Bombo 3 antes que a Los Pumas. No es lo mismo enfrentar a Fiji o Italia que al conjunto de Mario Ledesma.
Si los Pumas mantienen el nivel defensivo del Tres Naciones, sus rivales enfrentarán a un equipo que hace de la defensa un culto fanático e irrenunciable. Hoy, el que quiera atravesar la pared albiceleste deberá pasar antes por 15 tipos que juegan un rugby muy físico, que se paran delante de un tren, que tacklean hasta la inconciencia y que se golpean con desprecio a su propio físico.
Ni hablemos de lo peligroso que puede tornarse Argentina si mejora los lanzamientos ofensivos y ajusta el manejo y las conexiones con pelotas propias.
Desde aquél debut mundialista con Fiji en 1987, Los Pumas han estado presentes en los 9 mundiales disputados hasta el momento. En dos oportunidades el equipo llego a instancias de semifinales (RWCs 2007 y 2015).
Aún falta una vida para el Mundial 2023, pero en medio de un año difícil, el rugby argentino recibió hoy un guiño de la fortuna.