El partido que jugaba Paris Saint-Germain en Francia ante Istanbul Basaksehir fue suspendido por los propios jugadores, luego de que el cuarto árbitro rumano, Sebastian Colţescu, fuera acusado de comentarios racistas por un asistente del equipo turco.
El supuestamente agredido fue el camerunés nacionalizado uruguayo Pierre Webó, conocido en el fútbol sudamericano por su paso por Nacional de Montevideo.
Los futbolistas de los dos equipos se unieron para defender al africano y tomaron la decisión de retirarse a los vestuarios.
El encuentro era por la última fecha del Grupo H.