Argentinos Juniors celebra hoy su Día del Hincha, en una fecha que conmemora el logro deportivo más importante de la historia de un club que es considerado el Semillero del Mundo por la enorme cantidad de futbolistas de calidad que surgieron de sus divisiones inferiores.
Hace exactamente 35 años, el Bicho se coronó campeón de la Copa Libertadores en Asunción ante América de Cali, en los penales y tras haber igualado 1-1 el tercer partido que definió el título tras un 1-0 a favor en Buenos Aires y otro encuentro con el mismo resultado, pero en contra, en Colombia.
Con un proceso que inició el mítico Ángel Labruna cuando tomó las riendas del equipo en 1983 y continuó Roberto Saporiti ganando el Metropolitano 84, imprimiendo ambos al equipo de un estilo futbolístico refinado y jugando de igual a igual contra cualquiera en cualquier escenario, José Yudica asumió como entrenador y apostó por el mismo paladar negro para lograr el Nacional 85 y la Copa Libertadores de ese año.
Con un imbatible Enrique Vidallé en el arco, los siempre cumplidores Carmelo Villalba y José Luis Pavoni, la clase de Jorge Olguín, el temperamento del capitán y canterano Adrián Domenech, la pausa de Mario Videla, la contención y el claro primer pase de Sergio Batista, la calidad de Emilio Comisso, los desbordes de José Castro, el talento inigualable y goleador de Claudio Borghi y la velocidad supersónica de Carlos Ereros, ese Argentinos trascendió las fronteras de La Paternal y maravilló al mundo.
Durante esa Libertadores, los de Yudica superaron una durísima fase de grupos ante Ferro Carril Oeste, Fluminense y Vasco da Gama, con partido desempate ante los de Caballito incluido para acceder a la segunda instancia, donde tuvo que vencer a Blooming y a Independiente en un duelo vibrante. Luego, los tres partidos de la final y la consagración.
“Argentinos jugaba de igual a igual en todos lados. Tenía una mentalidad ganadora única ese plantel”, recordó Batista en diálogo con TNT Sports.
Domenech, agregó: “Ser el capitán era un orgullo terrible. Se priorizaba el grupo, no el equipo. Fue un proceso en cuanto al crecimiento de los que estábamos acá y a la incorporación de otros muchachos. Lo que nos hizo tan desenvueltos dentro de la cancha y de tener un funcionamiento y cumplirlo fue la conformación de un gran grupo que tirábamos para el mismo lado”.
“Va a ser muy difícil que Argentinos gane otra Copa Libertadores. Va a ser muy difícil que Argentinos tenga otro equipo como ese, con la personalidad que tenía ese equipo, con el libreto tan aprendido y tan respetado a muerte. El ir pasando etapas, hizo que el equipo se acostumbrara a jugar finales. Yo prefería jugar una final contra Juventus y no contra Temperley en cancha de Temperley”, manifestó Ereros en diálogo con la prensa de Argentinos.
Más tarde, ese plantel viajó a Japón para una Copa Intercontinental ante la poderosa Juventus comandada futbolísticamente por Michel Platini. Ese encuentro es recordado por muchos como el mejor de la historia entre los campeones americano y europeo. Fue un 2-2 inolvidable en el que el Bicho lució su mejor versión y perdió recién en los penales.
Pero la historia de este gran club no se reduce tan solo a la fecha que se recuerda hoy, porque si de logros se trata, hay otro que enorgullece a todos sus hinchas, que es el de ser el formador de la estrella más rutilante de la historia del fútbol mundial: Diego Armando Maradona.
También, más adelante, surgieron de la cantera inagotable del Tifón futbolistas de primera clase como Juan Román Riquelme, Fernando Redondo, Esteban Cambiasso, Juan Pablo Sorín y muchos más que brillaron en el mundo.
Tranquilamente, este Día del Hincha de Argentinos Juniors podría considerarse el Día del Hincha del buen fútbol.