Boca volvió a jugar en La Bombonera después del receso por el Coronavirus. El equipo de Miguel Ángel Russo venía de obtener dos victorias, pero en condición de visitante, por la Copa Libertadores. Pero le faltaba reencontrarse con su estadio, que esta noche no tembló ni latió al compás de su gente.
Al menos no lo hizo de manera real. La transmisión televisiva devolvió imágenes adornadas con el sonido artificial del público. La magia de un par de botones y una computadora.
En las tribunas de La Bombonera, naturalmente, no hubo público. Pero el club se las ingenió para vestirlas con decoración propia.
Se vio en el sector de los palcos, donde se colocaron cintas con la palabra “gracias” en distintos idiomas, en reconocimiento a los profesionales de la salud en el marco de la pandemia de Coronavirus.
También estuvieron las insignias de la hinchada. Para que esto suceda, informó TyC Sports, debieron entregar las banderas “cinco días antes para su sanitización”. Otros “trapos” fueron puestos en las últimas horas, previa autorización de la Conmebol.