El músico de rock canadiense Neil Young demandó al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, por infringir derechos de autor por tocar, sin autorización, sus canciones durante la campaña presidencial.
Young, de 74 años, presentó la demanda contra Trump en un tribunal de Manhattan (Nueva York) por el uso sin consentimiento de los temas “Rockin’ in the Free World” y “Devil’s Sidewalk”.
“No se trata de no respetar los derechos y las opiniones de los ciudadanos estadounidenses, que son libres de apoyar al candidato de su elección. No puedo permitir que mi música se use como una canción temática para una campaña divisiva y no estadounidense de ignorancia y odio“, señaló Young en declaraciones realizadas a Fox.
Si bien lo sucedido en Tulsa (Oklahoma), el 20 de junio, y el Monte Rushmore (Dakota del Sur), el 3 de julio, convencieron a Young de presentar la demanda, el propio músico comentó que se viene quejando del accionar del presidente y su equipo de campaña desde 2015.
Young no es el primer músico que se queja contra la utilización de su música por parte de Trump y su equipo de campaña, pero si el primero que lo demandó.
Los Rolling Stones, Steven Tyler (cantante de Aerosmith), Michael Stipe (vocalista de R.E.M). Lionel Richie, Green Day, Pearl Jam, y Blondie, son algunos de los grupos y músicos, que no quieren saber nada con Trump.