El Bayern Munich de Alemania y el Sevilla de España jugarán la final de la Supercopa de la UEFA con la presencia de público en las tribunas.
El Comité Ejecutivo de la UEFA decidió que “hasta el 30 por ciento” de la capacidad del Puskas Arena de Budapest (67.215 lugares) esté ocupada, aunque esta determinación podría modificarse de acuerdo a lo que suceda con la situación sanitaria ante la pandemia de Coronavirus.
“Si bien ha sido importante demostrar que el fútbol puede continuar en tiempos difíciles, sin aficionados, el juego ha perdido algo de su carácter. Esperamos usar la Supercopa de la UEFA en Budapest como un piloto que comenzará a ver el regreso de los fanáticos a nuestros partidos“, señaló Aleksander Čeferin, presidente de la UEFA.
Posteriormente, el dirigente indicó que “estamos trabajando en estrecha colaboración con la Federación Húngara y su gobierno para implementar medidas que garanticen la salud de todos los asistentes y participantes en el juego. No correremos riesgos con la seguridad de las personas“.
El encuentro entre el Bayern (campeón de la Champions League) y el Sevilla (ganador de la Europa League) se jugará el jueves 24 de setiembre.