Juventus logró uno de esos empates que valen como un triunfo, no sólo porque lo alcanzó en los últimos minutos, sino porque el 2-2 como local ante Atalanta le permitió conservar la ventaja ante uno de los rivales directos en la lucha por el título de la Serie A y encaminarse hacia su novena coronación consecutiva en Italia.
El equipo de Bérgamo, que tuvo entre sus titulares a Alejandro Papu Gómez y José Luis Palomino, estuvo a minutos de dar uno de los grandes golpes de la temporada y dar cuenta del líder del Calcio y en su propia casa.
Es que dos veces estuvo arriba en el marcador: primero con un gol del colombiano Duván Zapata a los 16 del primer tiempo, tras cesión de Gómez, y más tarde, nueve minutos antes de cumplirse el tiempo reglamentario, con una conquista de Ruslan Malinovskyi.
Pero Juventus, que contó con Paulo Dybala como titular y le dio acción a Gonzalo Higuaín en el complemento, no estuvo fino en la terminación de sus ataques, y debió contar con dos acciones fortuitas para lograr la igualdad, en ambos casos a través de Cristiano Ronaldo.
A los 10 del complemento el portugués puso el 1-1 luego de un dudoso penal que sancionó el árbitro del encuentro, Piero Giacomelli, por un balón que impactó en el brazo de Marten De Roon, pero con esa extremidad pegada al cuerpo y sin ninguna intención de entorpecer la trayectoria del centro de Dybala.
Por último, cuando el juego se diluía, el colombiano Luis Muriel le puso involuntariamente su mano a una intervención de Higuaín y Giacomelli, esta vez sí acertadamente, sancionó un nuevo penal que significó el 2-2 definitivo por la certera ejecución de Cristiano Ronaldo.
Con este empate, Juventus se mantuvo al tope de las posiciones con 76 puntos, 8 más que Lazio y 9 más que Atalanta, que espera el cruce de cuartos de final de la Champions League ante París Saint Germain.