El ascenso a la Premier League que Leeds United logró de manera anticipada este viernes, después de 16 años navegando en el ascenso del fútbol inglés, terminó de sentenciar una historia con presunción de final feliz, desde el instante mismo que marcó su comienzo.
Después de un primer año en el cual el objetivo se hizo polvo en la parte final de la temporada, Marcelo Bielsa, seguramente contra su voluntad, definitivamente se colgó el cartel de celebridad en aquella ciudad del condado de Yorkshire del Oeste.
No es para menos: este histórico equipo del fútbol británico, que supo codearse con los grandes europeos en las décadas de 60 y el 70, volvió al lugar donde quería estar.
Esto no hizo más que despertar la locura de una ciudad que construyó, sin pausa, una relación simbiótica con un loco (u obsesivo, o trabajador, o detallista, o como cada quien quiera catalogarlo) entrenador rosarino que llegó para cambiar su destino.
Muestra cabal de lo expuesto fue la situación que vivió Bielsa este viernes, cuando la derrota de West Bromwich ante Huddersfield decretó el regreso de Leeds a la máxima división inglesa.
“Hero”, rezó el posteo de uno de los tantos fanáticos que se acercó hacia la casa del ex seleccionador argentino para manifestar su gratitud.
Sin el habitual intérprete que lo acompaña en cada conferencia, Bielsa devolvió unos rústicos “thank you” y agradeció con sus manos. Y saludó con el codo a casi todos y se sacó fotos con varios.
“I don’t speak english. Only say thank you”, esbozó el rosarino, con dudosa gramática.
Su esfuerzo comunicacional fue reconocido. “Gracias por todo”, le devolvió un fanático en un no menos rudimentario español.
El video, subido a las redes sociales por un fanático de Leeds, no hizo más que confirmar un romance definitivo. Crazy Bielsa.
Foto: Leeds United.