El equipo Mercedes dominó la clasificación para el Gran Premio de Austria de Fórmula 1, ya que el finlandés Valtteri Bottas, el hombre que se quedó con la pole, y el inglés Lewis Hamilton, fue su escolta, partirán desde la primera línea de la grilla.
Sin embargo, Hamilton y el equipo alemán vivieron un momento de incertidumbre, cuando el actual campeón de la categoría fue investigado por los comisarios deportivos, a raíz de una dudosa maniobra.
Hamilton fue investigado porque no habría disminuido la velocidad, cuando Bottas se despistó delante de él en el final de la Q3, pero tras revisar las imágenes, los comisarios deportivos lo eximieron de cualquier sanción.
“Hamilton mencionó que pasó un panel de luz verde en la curva 5. El video confirmó que había banderas amarillas y paneles de luz verde al mismo tiempo, y por lo tanto mostraron señales contradictorias para el piloto”, señaló un comunicado de prensa.
De todas maneras, más tarde revieron su decisión y penalizaron al piloto británico con tres posiciones en la grilla de largada.
Pero además, Hamilton fue investigado también por una posible infracción por sobrepasar los límites de la pista (vuelta 10), de la cual salió airoso.
“Extrañé este sentimiento después de clasificar, los temblores después de llevar el auto al límite. Fue un buen resultado hoy, pero mañana es lo que importa”, expresó Bottas en conferencia de prensa.
La diferencia con el resto fue más que considerable, ya que el tercero, Max Verstappen, de Red Bull, clasificó a 0.538. Lando Norris, con su McLaren, dio la sorpresa de la jornada y finalizó cuarto, a 0.687.
Ferrari directamente decepcionó a sus fanáticos. Charles Leclerc largará séptimo, tras haber entrado con lo justo en la Q3 y con un tiempo que quedó a 0.984 del poleman. Lo de Sebastian Vettel fue aun peor para los de Maranello, ya que no logró meterse en la última tanda y partirá mañana desde la undécima ubicación.