El Real Madrid se consagró hoy campeón de La Liga española de fútbol, tras ganarle 2-1 al Villarreal en el estadio Alfredo Di Stéfano y sacarle siete puntos de diferencia al escolta Barcelona, a una fecha por terminar el campeonato.
Con goles del francés Benzema, de gran torneo, el Real Madrid conquistó su trigésima cuarta estrella local y ya enfoca sus cañones a la revancha del 7 de agosto con el Manchester City de los octavos de final de la Champions League, luego de la derrota 2-1, en el Santiago Bernabéu.
El equipo de Zidane tuvo un gran reinicio de temporada luego del parate por la pandemia del Covid-19 y ganó los diez partidos que disputó.
El Merengue tomó las riendas del partido desde el comienzo, aunque fue cauto a la espera de aprovechar su mejor ocasión frente a un rival que atinó sólo a defenderse en los minutos iniciales.
A los 28, llegó la apertura del marcador para el local, con una pelota que robó Casemiro en el medio, tocó para Modric y el croata abrió a la derecha para Benzema, quien disparó y batió al arquero Asenjo para el 1-0.
Con la ventaja, el Real Madrid le cedió la pelota a un Villarreal que no tuvo ideas para lastimar a Courtois.
En el complemento, Carvajal estuvo muy cerca en una escalada por derecha que finalizó con enganche y disparo que tapó Asenjo.
Luego, llegó la polémica por el penal que cobró el árbitro, en una falta de Torres sobre Sergio Ramos que no existió. El capitán Merengue se hizo cargo y en vez de ejecutar directo, tocó el esférico hacia adelante para Benzema y el francés convirtió a la carrera. El juez lo invalidó por invasión del delantero y lo hizo patear de nuevo. Esta vez, fue el número nueve del Real Madrid, que no dudó y venció a Asenjo para el 2-0.
Villarreal le puso suspenso al final con un certero cabezazo de Iborra que significó el descuento. A los 47, Iborra se perdió un gol increíble y la tiró afuera, con Courtois en el piso.
De inmediato, Vinicius hizo una gran jugada que terminó con gol de Asensio, pero el árbitro, a instancias del VAR, lo invalidó por mano en el camino de Benzema.
El Real Madrid gritó campeón en una Liga en la que fue de menor a mayor y ahora se ilusiona con tomar envión para pisar nuevamente fuerte en Europa.