Portugal afrontará este domingo un cambio por demás importante en su lucha contra el Coronavirus, a raíz de la evolución local positiva: el Estado decidió flexibilizar las restricciones y pasar de un estado de emergencia a un estado de calamidad.
Esto supone que a partir del lunes se reanudarán varias actividades en ese país europeo. Por caso, un sector del comercio y algunos edificios culturales como bibliotecas y archivos, retomarán paulatinamente su habitualidad. También podrán comenzar a practicar deportes al aire libre, con ciertos recaudos.
En ese marco, el fútbol no quedó exento de ese avance en la lucha contra una pandemia que se cobró poco más de mil muertos entre casi 25200 infectados por el Covid-19.
Según anticipó en los últimos días el primer ministro portugués, António Costa, la Liga de ese país reanudará sus compromisos el 30 y 31 de este mes, por supuesto, a puertas cerradas.
La medida, pendiente de la autorización definitiva de la Dirección General de Salud, incluye también a la Segunda División y a la Copa Portugal.
Algunos equipos ya iniciaron los entrenamientos con medidas preventivas para evitar el contagio entre los integrantes de sus planteles. Otros, volverán a hacerlo este lunes.
“Nadie puede interpretar el fin del estado de emergencia como el fin de la emergencia sanitaria”, advirtió Costa, quien aclaró también que no tendrá “vergüenza en dar un paso atrás, si fuese necesario, para garantizar el bien esencial, que es la seguridad de los portugueses”.
La Liga de Portugal disputó 24 de las 34 fechas estipuladas para su torneo 2019-20, la última de ellas el pasado 8 de marzo. Hasta ese momento, Porto era el líder con 60 puntos, seguido por Benfica con 59.